Si la importancia de la estructura de un piso o apartamento es importante (el continente), más lo es el uso que hagamos del contenido. Exacto, que una vivienda sea o no sea agradable depende casi en su totalidad de la decoración, allí entra en juego la inventiva de sus habitantes.

Por ello, la conclusión a la que llegamos es clara: puedes hacer tu casa cozy con estos sencillos consejos, a pesar de que no dispongas de la mejor arquitectura. Sigue estos consejos y sube la temperatura de tu casa para hacerla más acogedora. 

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Salón con sofá blanco y una butaca marrón y otra negra.
Fredrik J Karlsson

1. El abrazo mullido

Si el sofá es confortable, la casa también lo será. Lo ideal es que tenga formas redondeadas y un relleno mullido. No hay que dejarse llevar solo por el diseño: “Es imprescindible probarlo antes de comprarlo y sentir que estás cómodo”, comentan desde Roche Bobois. Para darle un efecto más envolvente podemos servirnos de mantas en el reposabrazos y de cojines con relleno de plumas.

Dormitorio con cabecero de madera y mesita de noche suspendida.
Eugeni Pons

2. Sensaciones únicas

Nada iguala las sensaciones que transmiten una manta de lana virgen, una sábana de algodón orgánico, un sofá de cuero o un suelo de madera. Los materiales naturales aportan emociones que estimulan un ánimo favorable y expresan un interiorismo más honesto y perdurable.

Dormitorio infantil con camas con estructura de madera.
Stella Rotger

3. Protección sutil

Unas ventanas sin cortinas quedan desangeladas. Desde Gastón y Daniela, sugieren elegir telas de gran caída como lanas o terciopelos finos. Otra alternativa pasa por completar con un faldón de un tejido con más peso las cortinas que ya se tienen.

Dormitorio con paredes de piedra y techo de madera.
Eugeni Pons

4. Fragancias sugerentes

Ciertos aromas transmiten sensaciones positivas, como las notas frescas de lavanda, que se utiliza entre otras cosas para inducir al descanso, la mejorana y la rosa damascena, que inspiran seguridad y paz interior, o los matices relajantes de la vainilla o el ámbar.

Zona de paso a salo´n y terraza con puerta corredera, bici plegable y butaca de madera
José Hevia

5. Con buena luz

Está más que demostrada la relación entre la luz natural y nuestro equilibrio físico y mental. Por eso es importante que nuestra casa aproveche al máximo los rayos del sol, y multiplicar sus efectos con materiales, acabados y texturas que la reflejen, como el color blanco, las maderas en tonos claros y las superficies pulidas.

Salón de estilo retro con paredes de madera.
Eugeni Pons

6. Bálsamo natural

La vegetación nos reconecta con la naturaleza, ejerce una influencia positiva en nuestro ánimo y propicia una atmósfera saludable, oxigenada y limpia en los interiores gracias a su capacidad de regular la humedad y neutralizar sustancias tóxicas. Las aromáticas, además, son un recurso útil para la cocina.

Alfombra gris con botines.
RBA

7.Pisadas felices

Las alfombras dan calidez a un suelo desnudo y frío, y enmarcan espacios para sentirnos más arropados en el salón o el dormitorio. Las de lana virgen o con mezcla y las de algodón de pelo largo son cálidas en invierno y frescas en verano, y actúan como excelentes aislantes térmicos.

Recibidor con arrimadero.
Espejo & Goyanes

8. Carácter especial

Los zócalos altos o arrimaderos visten la pared y le dan un carácter especial a la casa. Los más vistosos son los diseñados con madera o DM lacado, o en rafia y papel pintado como opción más económica. Se pueden pintar de blanco o en tonos satinados que coordinen con la decoración.

Baño con bañera exenta y gran ventanal.
Eugeni Pons

9. La luz que nos favorece

Para crear una atmósfera cálida, desde Boisca&Botey, recomiendan la luz regulable. Otra herramienta para crear ambientes acogedores es colocar distintos puntos de luz en la librería, los aparadores, etcétera. Y no hay que renunciar a la magia del destello natural de una vela.

Salón moderno con molduras en el techo y sofá beige.
Eugeni Pons

10. Mezcla enriquecedora

La mezcla de estilos con criterio aporta personalidad a un espacio. Para los responsables de Westwing, la clave está en apostar por un lenguaje común para la mayoría de muebles y dar un toque diferente en un par de piezas y los elementos auxiliares.

Salón con salida al jardin, sofa gris y armario empotrado de madera.
Eugeni Pons

11. Sin obstáculos

La disposición de la decoración debe conseguir un efecto de movimiento ligeramente sinuoso, lo que según el feng shui favorece el flujo del chi, la energía que da vida. La sensación de respaldo y seguridad de un sofá se refuerza colocándolo contra la pared y con una buena visión del acceso al estar.

Salón con chimenea moderna y butaca gris.
RBA

12. Un tono agradable

Acertar con el color crea ambientes en armonía que no cansan. “Beiges, grises y blancos no pasan de moda y sirven de base neutra para cualquier tipo de decoración”, afirman en Grupo Porcelanosa.

Dormitorio modernos con librería y ropa de cama en verde deslavado.
Eugeni Pons

13. Todo en su sitio

El orden es sinónimo de equilibrio; con él se logra tranquilidad emocional y bienestar porque todos los muebles y objetos de la casa tienen su espacio. Cajas, cestas y separadores ayudarán a tenerlo todo organizado tanto en estanterías a la vista como dentro de los armarios y los cajones.

Comedor moderno con claraboya en el techo.
Eugeni Pons

14. Un lugar evocador

Los retratos familiares, cuadros e imágenes de recuerdos son siempre compañeros especiales. Se pueden colgar con sistemas que no ocupen espacio, con marcos de perfiles delgados o directamente sobre la pared. Puede jugarse con la mezcla de estilos y las composiciones geométricas.

Salón pequeño con sofá blanco, mesa de centro redonda y manta de pelo largo.
Jens Eliasson

15. El broche final

Los cojines y plaids son mucho más que complementos decorativos. Los de pelo largo, como el mohair, abrigan los espacios, los hacen más confortables y son los aislantes térmicos perfectos. Además son un recurso ideal para dar un aire nuevo al espacio de forma inmediata y económica.