Convierte tu dormitorio en un espacio de ensueño con estos cuatro trucos. Transforma tu dormitorio en un templo del descanso, introduciendo aquellos elementos que lo convertirán en un bonito refugio de estilo nórdico.

Crea la mejor versión de tu dormitorio siguiendo estos consejos y consigue un estilo distinguido y moderno para el lugar donde te relajas y donde recuperas fuerzas. Te despertarás en una habitación inspiradora, más allá de las tendencias. 

Y lo mejor de todo es que no se trata de trucos para expertos sino que hasta los menos familiarizados con el lenguaje del interiorismo pueden llevarlos a cabo, con resultados sorprendentes. 

1 /15
Dormitorio de estilo nórdico con silla y  escritorio que da a la ventana.
Mar + Ask

1. De luz y de color (blanco)

En un dormitorio de estilo nórdico, la presencia de la luz natural es fundamental. Da igual que proceda de una ventana pequeña o de un enorme ventanal. La cuestión es que esté ahí, iluminando y ensalzando la preciosa y cálida gama cromática que gira alrededor de los colores neutros. 

detalles de dormitorio con una cama con bandeja con desayuno
Borrós Interiorisme

2. Algodón y lino

En un dormitorio en general, y en uno de estilo nórdico en particular, la parte textil es fundamental, ya que ayuda a dar vida a un lugar saludable. Evita en la medida que puedas los tejidos sintéticos y escoge linos y algodones para disfrutar de unos dulces sueños. En la imagen, Garden Apartments en Barcelona, de Borrós Interiorisme

colgador como recibidor
Mdb Studio

3. Más madera

Si hay un material que define el estilo nórdico, es la madera. Es ideal para crear una atmósfera cálida en lugares donde las temperaturas acostumbran a ser bastante bajas. En la fotografía, vestidor de madera de Mdb Studio que también ejerce la función de estantería.   

dormitorio en tonos claros con cama con ropa de cama blanca y cortinas color crema
Salva López

4. Telón de fondo

Las cortinas de materiales naturales pueden convertirse en tus mejores aliadas a la hora de crear diferentes atmósferas. Apuesta con colores que sintonicen con el resto de la decoración y deja que descansen unos centímetros más de la línea del suelo para generar un clima apacible. En la imagen, casa de Valeria Vasi e Isern Serra (Barcelona). 

dormitorio con separador de madera
Eugeni Pons

5. Con austeridad

Una de las características del estilo escandinavo es la de no recargar los espacios. Este cuarto de una casa de Javea es un claro ejemplo en el que se cumple esta norma. Una cama con sábanas en tonos neutros, luminarias de estética minimalistas y un separador de espacios de madera. 

dormitorio cabecero cojines
RBA

6. Detalles naturales

Para destacar sobre la sutileza de los clásicos tonos blanco, beige o marrón claro propios de la decoración nórdica en los dormitorios, se puede jugar con el color. En este caso las flores de la mesilla aportan vida de manera natural. El espíritu campestre queda reforzado por las franjas en color verde de los cojines de la cama. 

dormitorio4 madera butaca rayas vigas techo cama cabecero madera
Valentín de Madariaga

7. Muebles de madera

Por si quedaban dudas: la madera es el material perfecto para combinar con los tonos suaves que caracterizan el estilo escandinavo. Tanto en el cabecero como en las mesillas de noche, como en el banco a los pies de la cama, las piezas fabricadas con este material natural siempre destacan al mismo tiempo que aportan calidez al dormitorio.

IKEA Dormitorio 01 cama lámparas mimbre cortinas blancas
Ikea

8. Detalles en mimbre

Los colores naturales favorecen el estilo nórdico. En este caso se ven reforzados por los detalles de mimbre le aportan esa calidez que irradia este tipo de decoración. Así lo corrobora este dormitorio donde destacan dos grandes lámparas colgantes sobre la cama, son diseños que encajan perfectamente en el estilo escandinavo por su sencillez y sus tonos.

Dormitorio principal
Kevin Scott

9. El blanco como base

El blanco es uno de los colores más habituales en decoración, pues es sencillo de combinar y transmite pureza, amplitud y luminosidad. Aunque no hay una norma escrita, conviene tenerlo como base que se combina con otros tonos neutros, como el gris y el beige, incorporándolos en complementos para conseguir así un espacio más cálido. 

Dormitorio principal
Eugeni Pons

10. Muebles sin tiradores

El estilo nórdico es sencillo, pero esta cualidad no implica renunciar al uso de piezas de mobiliario en el dormitorio como mesitas de noche o cómodas. En su elección deben los diseños sencillos y en madera.

Para los muebles más grandes lo ideal es apostar por líneas sencillas y, a ser posible, sin tiradores, lo que le proporciona un acabado más limpio. Cuando el almacenaje queda a la vista, lo recomendable es que todo esté perfectamente organizado, en busca de armonía.

Dormitorio madera
María Pujol

11. Serenidad con los textiles

Apostar por textiles naturales y saludables es un requisito imprescindible para conseguir una perfecta decoración de estilo nórdico. Tejidos como el lino o el algodón lavado aportan serenidad a la estancia de la casa destinada al descanso.

dormitorio abuhardillado con ventana en el techo Velux
Velux

12. Obsesión por la luz

Los dormitorios de estilo nórdico son espacios donde abunda la luz natural, por eso suelen ubicarse en espacios de la casa con grandes ventanales. Además, en su decoración se tiende a incluir diferentes puntos de luz artificial con la que generar atmósfera cuando el sol se ha escondido.

tallasen estructura cama tapizada kulsta beige claro luroy  lámpara redonda estantería blanca
Ikea

13. Una cama con patas

Este estilo procede de los países nórdicos y en el norte de Europa las habitaciones no suelen ser muy espaciosas. Por eso, para aportar ligereza visual, es frecuente que las camas tengan estructuras con patas, que como dejan un hueco entre el colchón y el suelo, dan la sensación óptica de que el espacio es más grande. También puede pasar que la necesidad de almacenaje se imponga a la estética y en este caso, la solución está en las estructuras con cajones integrados.

Dormitorio principal gris cama cabecero
Sergio López

14. Un cabecero mullido

La elección del cabecero depende de gustos y preferencias. Para leer cómodamente por las noches, un cabecero acolchado con un tejido en tonos suaves es una opción muy práctica que conviene tener en consideración, pero no es la única. Los dormitorios de estilo nórdico admiten cabeceros de madera o de mimbre e incluso se puede prescindir de él. 

PPT Cerdanya dormitorio
Enric Badrinas

15. Suelos laminados

La madera es, sin duda, seña de identidad del estilo nórdico. En lugar de escoger maderas procedentes de selvas tropicales, para decorar según la filosofía escandinava hay que decantarse con materiales propios del norte, como el pino o el abedul, que aportan un toque luminoso y ligero al dormitorio tanto en las paredes, como en el techo, en los muebles y hasta en el suelo. El parquet y los suelos laminados son muy frecuentes en el dormitorio nórdico por el carácter acogedor y cálido que generan.

 

Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en www.arquitecturaydiseno.es, suscríbete a nuestra newsletter.