Esta casa de mediados del siglo pasado que se encuentra en la bahía de San Francisco necesitaba una actualización. Diseñada originalmente por el arquitecto Joseph Esherick en 1961, bajo una apariencia moderna y musculosa con la estructura de hormigón, se ocultaba un plano de planta que ya no era adecuado para une estilo de vida contemporáneo, ya que los interiores originales eran sorprendentemente tradicionales y estaban muy compartimentados. Los nuevos propietarios de McIntyre Residence encargaron a Richard Beard Architects y The Wiseman Group que remodelaran la casa y recuperaran el espíritu inicial abriendo el plano de planta y conectando el interior con los extensos jardines. El resultado es una casa renacida en la que, además, el arte destaca en cada rincón.