Vivir en Madrid cerca de todo y conectado a todo, pero al mismo tiempo disfrutar de una casa tranquila e íntima donde reine el silencio es el sueño de cualquiera que viva en una gran ciudad. Este proyecto del estudio Residentially hace realidad este sueño en este piso del barrio de Chamartín donde se respira una atmósfera llena de paz.
Para lograrlo, se apoyaron en la elección de una gama cromática neutra y cálida, se priorizó la iluminación indirecta de carácter intimista, se buscó la horizontalidad "porque transmite sensación de calma, estabilidad y descanso y no puede moverse porque ya está apoyada en el suelo" y se estableció una mejor relación con los espacios. Además, se cambió la distribución de este piso de 170 metros cuadrados situándose el dormitorio principal y su baño donde antes se encontraba la zona de servicio: "Se encontró un gran potencial en el patio sur por tener una escala más íntima y disfrutar de mayor silencio y calma, idónea para la habitación", señalan desde el estudio.
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