La considerada 'Mother city' de Sudáfrica, la ciudad más emblemática y con una vida social muy animada, dispone de una infinidad de rincones que todo amante del diseño -y de los viajes en general- no se puede perder. No hay adjetivo alguno que pueda definir como ha crecido la ciudad en los últimos años y como lo hace día tras día. Más aún por el aumento de muchos internacionales que han optado por convertir a Cape Town -o Ciudad del Cabo en español- en su nuevo hogar. 

¿Será por su caluroso clima? ¿Será por la calidez de sus habitantes? ¿Será por sus hermosas playas? ¿Será por su variedad gastronómica? Sea por lo que sea, Cape Town se ha convertido en el nuevo place to be y nosotros te traemos como vivirla al máximo y como un local con 48 horas. Por supuesto, no son suficiente para descubrirla entera, ni siquiera llegar a la mitad, pero si lo son para poder hacerse una idea y tener millones de ganas de volver lo más pronto posible a por más. 

Día 1: llegada y toma de contacto 

Cape Town cuenta con un aeropuerto internacional que lleva su mismo nombre y que cada vez cuenta con más vuelos internacionales a cualquier rincón del mundo. Por el momento, Reino Unido y Alemania son los dos principales países internacionales con vuelos directos, pero todo apunta a que pronto habrá muchos más. Bajar del avión y dirigirse al centro no es tarea difícil ya que el aeropuerto no se encuentra lejos de la ciudad y los vehículo de transporte con conductor son muy efectivos y económicos. 

La villa cuenta con una infinidad de hoteles para todos los gustos, necesidades (y presupuestos). Incluso cuenta con uno dedicado a perros con servicio de guardería. Para gustos los colores. Si eres de los que buscan grandes hoteles con todo lujo de detalle y un servicio impecable (y por supuesto, eres amante del diseño) una excelente opción es el One&Only Cape Town. Ubicado en una de las zonas más emblemáticas de la ciudad, en el Victoria & Alfred Waterfront: un destino de uso mixto ubicado en el puerto en funcionamiento más antiguo del hemisferio sur. El hotel cuenta con vistas impresionantes a la emblemática Table Mountain en casi todos sus rincones y todo es posible gracias a cada una reciente remodelación que ha buscado ser un punto de encuentro entre locales y visitantes. Así, el equipo ha trabajado estrechamente con artistas locales para decorar la propiedad con piezas únicas. 

One&Only Cape Town, un hotel de lujo ubicado en un punto estratégico de la ciudad.

One&Only Cape Town, un hotel de lujo ubicado en un punto estratégico de la ciudad.

One&Only Cape Town

Pero para los que buscan una opción más tranquila y sentirse literalmente en casa, Luna Loft es la mejor elección. Un apartamento en el centro de la ciudad, en un enorme edificio, que se convierte en el oasis de paz de quien decida descubrirlo. Tangerine Studio, un estudio de diseño de interiores emergente en la ciudad fundado por dos jóvenes emprendedores Mish y Ryan, ha sido el encargado de diseñar cada uno de los rincones con la colaboración de artistas locales y haciendo uso de materiales locales. Minimalista, con el color blanco por excelencia y muebles y accesorios hechos al milímetro donde los materiales naturales son los protagonistas. 

Luna Loft, el airbnb diseñado por Tangerine Studio.

Luna Loft, el airbnb diseñado por Tangerine Studio.

Luna Loft

El primer café y puesta en marcha

Una vez instalados es hora de ponerse en marcha para descubrir en 48 horas los principales rincones de Cape Town. Y el inicio de la aventura no podría ser otro que el centro de la ciudad, más concretamente en la inmensa escultura de Nelson Mandela que saluda desde el balcón del ayuntamiento, el lugar desde el que ofreció su primer discurso cuando fue liberado tras 27 años en prisión. 

The Ladder, la cafetería más emblemática de Madrid.

The Ladder, la cafetería más emblemática de Madrid.

The Ladder

Desde allí toca andar por las bulliciosas calles del centro de Ciudad del Cabo y sus coloridos murales ubicados en una infinidad de paredes. Pero antes de seguir, toca tomar el primer café de la mañana acompañado de algún dulce y el lugar por excelencia ubicado a pocos pasos es The Ladder. La historia de una pareja: ella de Moscú, el de Ciudad del Cabo, se encontraron y enamoraron en St. Petersburgo y finalmente han terminado en la "ciudad madre" de Sudáfrica y con una de las cafeterías más emblemáticas de la villa. Un lugar minimalista cuyas paredes son decoradas con las obras de artistas y fotógrafos locales (disponibles para la compra). Obligatorio tomar un delicioso café (el té matcha también está exquisito) y algún plato del menú, en especial, destacan por tener el mejor tempeh de la ciudad (y no lo decimos nosotros, sino la multitud de clientes que lo piden semana tras semana). 

Seguimos. A pocos pasos del café se encuentra la Green Point Square un lugar con una ecléctica mezcla de estilos arquitectónicos: el art déco se alterna con puro neoclasicismo. Parada obligatoria es también es el Slave Lodge, uno de los edificios más antiguos de Ciudad del Cabo que ha ido cambiando su uso hasta la actualidad:  Slave Lodge, Edificio de Oficinas Gubernamentales, Antiguo Tribunal Supremo y Museo de Historia Cultural de Sudáfrica. Otra parada es las Casas del Parlamento, así como The Company's Garden (un parque realmente precioso), el Jurado de Clasificación de Razas y los famosos y coloridos edificios del Boo-Kap. 

Siguiente parada

Visto el centro de la ciudad, toca poner rumbo a una de las zonas más emblemáticas: el Victoria & Alfred Waterfront. Situado en el puerto en funcionamiento más antiguo de Sudáfrica, con la icónica Table Montain como telón de fondo, el V&A Waterfront es uno de los lugares favoritos para los locales e internacionales. Cuenta con más de 80 restaurantes, 12 hoteles, más de 500 tiendas minoristas, cinco museos y entretenimiento en vivo los 365 días del año con la mejor música local. En otras palabras: ¿qué se puede pedir más? 

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Victoria & Alfred Waterfront, un lugar muy emblemático en Cape Town.

Victoria & Alfred Waterfront, un lugar muy emblemático en Cape Town.

Pexels

Seguramente a estas horas el hambre empezará a hacerse más latente y aunque por la zona hay infinidad de restaurantes, los fines de semana se celebra el emblemático Oranjezicht City Farm Market, un templo a lo ecológico donde productores locales exponen sus productos. El punto de encuentro perfecto para un sábado o domingo diferente y entretenido. Puestos de comida de toda índole para probar absolutamente de todo. Es allí donde la famosa cadena de dulces saludables, Thank Goodness Foods.

Thanks Goodness Foods, dulces saludables y deliciosos.

Thanks Goodness Foods, dulces saludables y deliciosos.

Thanks Goodness Foods

La historia de tres hermanos que han crecido dentro de las cocinas y decidieron hacer algo conjuntamente. ¿El resultado? La creación de dulces preparados con alimentos locales y de calidad excelente sin gluten y sin azúcares refinados -y la mayoría veganos-. Todos preparados cada día artesanalmente. Se pueden adquirir a través de su página web o en los más de 14 locales de la ciudad que los disponen -todos son cafeterías o similares con quien comparten unos mismos valores- pero los fines de semana tienen su puesto en el mercado. 

Por la tarde

Energías recargadas es hora de dar una vuelta por Victoria & Alfred Waterfront y pararse a descubrir el Zietz MOCAA –Museum of Contemporary Art Africa–. El  museo de arte contemporáneo de Ciudad del Cabo donde hoy cuelgan las obras más osadas de los artistas más reivindicativos del panorama artístico africano. Un espacio revolucionario digno de visitar. 

Signal Hill, el lugar ideal para ver el atardecer.

Y sin prisa pero sin pausa, toca elegir el lugar donde ir a ver el atardecer. Muy emblemático en la ciudad, es una rutina prácticamente de todos los días de los locales, y más aún en los días festivos. El Signal Hill es uno de los rincones por excelencia. Una emblemática colina de cima plana también conocida como "El flanco del león", ya que su forma se asimila a una esfinge de león. Se puede acceder fácilmente con coche, taxi o VTC. Una vez allí toca sentarse y contemplar las impresionantes vistas de las eternas aguas del mar del Atlántico y la playa de Bantry Bay. Recomendación: llevar una cesta con vino, unos snacks y unos cojines. 

Our Local, una antigua tienda de anticuarios transformada en restaurante.

Our Local, una antigua tienda de anticuarios transformada en restaurante.

Mireia Noguer Artigas

Y para terminar el día redondo, una cena en Our Local es una excelente idea. Una antigua tienda de anticuarios que ha sido convertida en un restaurante muy emblemático en la ciudad. Desde exquisitos desayunos, a menú de comidas y también de cenas de jueves a sábado. El local parece un jardín donde hay lugar para absolutamente todo: desde jarrones de todos los tamaños, a plantas, lámparas, estatuas, muchos libros, una enorme fuente... No hay rincón vacío. 

Día 2: Lion's Head 

Si la fiesta define a Cape Town, también lo hace el deporte. Madrugar y salir a correr por las playas y los paseos marítimo de la ciudad es la rutina de prácticamente todos sus habitantes, algo que te anima a unirte a ello. Y una de las rutas más emblemáticas es el hiking al Lion's Head. Una montaña ubicada entre la famosa Table Montain y el Signal Hill con forma de cabeza de león -de aquí el nombre- se encumbra a 669 m sobre el nivel del mar. El pico forma parte del dramático telón de fondo de la Ciudad del Cabo y es parte del parque nacional de Table Montain.

Lion's Head, el hiking más emblemático de Cape Town.

Lion's Head, el hiking más emblemático de Cape Town.

Mireia Noguer Artigas

El tiempo de ruta depende del estado físico de cada uno, pero se puede hacer fácilmente en 2 horas. Subir a primera hora a ver el amanecer o a última para el atardecer es siempre una buena opción, aunque se debe hacer totalmente a pie, no hay opción para los coches. 

Nourish'd, donde disfrutar de excelente jugos, smoothie bowls y mucho más.

Nourish'd, donde disfrutar de excelente jugos, smoothie bowls y mucho más.

Mireia Noguer Artigas

A la bajada toca recuperar energías y un desayuno en uno de los locales de Nourish'd Café y Juicery siempre es una excelente opción. En la actualidad disponen de tres espacios, pero se sirve un menú prácticamente igual en todos ellos. Una infinidad de smoothie bowls para todos los gustos, a tostadas, ensaladas, zumos naturales y muchísimo más. Recomendación: el Magic mangito bowl es una exquisitez. La historia de Natasha -Tash, así la llaman-, una emprendedora que tras crecer en la parte trasera de la pizzería de su padre (Bacini's on Kloof) y de un viaje muy renovador a Costa Rica decidió emprender su negocio personal: de casa de jugos naturales a tres restaurantes en Cape Town. Y aún faltan muchas cosas por llegar. 

Día de playa 

Cape Town dispone de impresionantes playas para todos los gustos. Ricas en belleza natural, con el impresionante paisaje de la Cordillera Cape Fold, las playas de la «Ciudad Madre» se encuentran entre las más pintorescas del mundo. Y todas se encuentran ubicadas a lo largo de las costas de los Océanos Atlántico e Índico. Ya sea caminar sobre arena blanca suave, admirar un bellísimo paisaje, darse un chapuzón en el mar, nadar con los pingüinos, surfear, hacer yoga, o incluso disfrutar del sol completamente desvestido: hay opciones para todo.

¿Las más emblemáticas? Empezamos con las playas de Clifton que más concretamente son 4 -Clifton 1, Clifton 2...-. Con arena suave, agua cristalina de color turquesa, gigantescas rocas y magníficas vistas, se encuentran ubicadas en el afluente barrio de Clifton y se dividen naturalmente por afloramientos de roca de granito. Cada una de las cuatro playas tiene su propio característica y visitantes.

Cape Town cuenta con infinidad de playas, todas ellas diferentes y únicas.

Cape Town cuenta con infinidad de playas, todas ellas diferentes y únicas.

Mireia Noguer Artigas

Otra de las más emblemáticas es la Camps Bay Beach. Con arena blanca suave, aguas cristalinas de color turquesa y un paseo marítimo bordeado de palmeras que cuenta con boutique hotels, tiendas de moda, restaurantes, bares en la azotea con vistas panorámicas y clubes de playa de moda, Camps Bay es el corazón del litoral de Cape Town. Además, la playa está respaldada por la monumental Cordillera de los Doce Apóstoles. 

Finalmente, necesario también mencionar la Boulders Beach, una playa de arena suave y aguas cristalinas es conocida en todo el mundo por ser el hogar de una gran colonia de pingüinos africanos en peligro de extinción y el único lugar en el mundo donde se puede acercarse a ellos. 

El atardecer y la última cena

Como todos los días, toca elegir el lugar donde ir a ver el atardecer y por supuesto, uno no puede irse de Cape Town sin subir a la famosa Table Montain, una montaña de cima plana que ya se ha convertido en todo un icono de la ciudad.

Table Montain es la icónica montaña de Cape Town.

Table Montain es la icónica montaña de Cape Town.

Pexels - Tembela Bohle

Hay múltiples opciones para ello: desde contratar una excursión con cualquiera de las empresas que ofrece el servicio, subir a pie o decantarse por el teleférico. Las tres opciones son válidas, lo importante es llegar a la cima para disfrutar de sus impresionantes vistas y el precioso atardecer. 

Club Kloof, el nuevo place to be de Cape Town.

Club Kloof, el nuevo place to be de Cape Town.

Club Kloof

Y para la última cena el nuevo restaurante, Club Kloof es una excelente opción. Ubicada en la emblemática calle de Kloof, el restaurante combina una carta de comida de inspiración italiana con platos pensados más bien para compartir, con una excelente opción de cócteles y vinos. Un mix entre estilo italiano y parisino con un ambiente muy agradable y divertido. Y todo ocurre en un local donde el color rojo es el predominante en el interior y el amarillo en su preciosa terraza. 

Y así terminan 48 horas en Ciudad del Cabo, dos días muy activos con actividades para todos los gustos. Pero aún quedan una infinidad de cosas más por hacer, desde visitar los muchos viñedos que se encuentran a su alrededor a descubrir infinitos museos y cafeterías más o disfrutar de sus emblemáticas playas. Siempre hay algo que hacer en Ciudad del Cabo, pero dicen que siempre hay que dejar algo para volver, ¿no?