¿Por qué cuando intentamos colocar varios elementos en una mesa de centro no queda bien? ¿Y por qué pasa lo mismo cuándo lo hacemos en una estantería o una consola del recibidor? Si buscas la respuesta al enigma aquí tienes la solución: la regla del tres. Los interioristas aplican una regla para conformar un todo de distintos elementos.
Aunque en ocasiones le acompañe cierta mala fama, el tres es un número muy valorado en decoración, y un gran recurso para conseguir equilibrio y armonía. Por ejemplo, en el caso del proceso de creación de rincones especiales como los de lectura o similares, ya que normalmente son tres los elementos elegidos.
En el caso de tener una mesa de centro con seis elementos, habrá que agruparlos en grupos de tres, pudiendo también superponerse. Muestra de ello es el tradicional libro de gran formato sobre el que descansan una lupa o una vela. Sea como sea, el resultado no debe ser forzado sino natural. Sino funciona habrá que seguir probando hasta dar con la fórmula adecuada.