"La luz es todo. Sin luz no tendríamos diseño, no tendríamos nada. Por eso es tan atractivo trabajarla, porque es inmaterial. Mis lámparas no son formales, lo que me interesa es la luz, el juego de la luz", esto es lo que cuenta el diseñador Antoni Arola sobre su labor creando un sistema de luz reflejada en sus lámparas Lámina.
Este 2024 es el año en el que ha decidido ampliar la familia Lámina, trayendo al mundo novedades de Lámina, junto a Santa & Cole. En concreto, hablamos de nuevas versiones de sobremesa, pie y aplique, y nuevas posibilidades con Lámina Dorada. Te lo mostramos en detalle, así como la campaña creativa y de arte de Clara Quintana Studio sobre la obra de Arola y que recibe el nombre de "La reflexión de la luz".
Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en Arquitectura y Diseño suscríbete a nuestra newsletter.
La luz reflejada como iluminación afable
El diseñador Antoni Arola concibió Lámina en 2018 como un conjunto de lámparas de suspensión, surgidas tras un estudio de la luz reflejada. Más específicamente, fueron el resultado de un ejercicio de simplificación formal.
Su fuente de luz es un LED regulable integrado y este se proyecta sobre una pantalla metálica que funciona como reflector. Este hecho hace que se revierta en muchas direcciones y se obtiene, de este modo, una luz indirecta que ofrece un alto confort visual. Como vemos, la luz reflejada se presenta como una iluminación agradable para la vista, que Arola obtiene con la unión de solo dos elementos: una línea de luz y una fina hoja de aluminio.
Novedades dentro de la familia
Esta combinación de dos elementos la vemos también en todos los formatos de Lámina, que se adaptan al espacio y a todo tipo de uso. De la conocida suspensión de la lámpara, pasamos a tres nuevos modelos de iluminación: de sobremesa, pie y aplique.
Lámina 165 y Lámina 45, cuyos nombres hacen referencia a la longitud de sus pantallas, ahora presentan versiones de pie y aplique. En Lámina 45, además, también encontramos una versión de sobremesa.
Lámina Dorada
Una gran novedad, que merece una mención aparte, es Lámina Dorada, y ello se debe a que es distinta a las demás y que forma una entidad por sí sola. Luce un arco enrasado y una pantalla dorada, como bien indica su nombre. Esta última cualidad hace que la lámpara proporcione una luz cálida y una atmósfera de intimidad en cualquiera de sus formatos: de suspensión, aplique, pie y sobremesa.
Otro aspecto que la hace destacar y la embellece es su variación de evocaciones escultóricas, ya que provoca una armonía entre poesía y eficiencia lumínica, e ilumina con mucha calidad.
"La reflexión de la luz"
Clara Quintana Studio estuvo a cargo de la primera campaña de Lámina, y ahora lo vuelve a estar con la "La reflexión de la luz". Esta campaña creativa y de arte busca exhibir la familia extendida de Lámina y acentuar la habilidad de Arola para domesticar la luz. Ello lo hace mediante una composición visual con todas las versiones de la familia, junto con Lámina Dorada, frente a una bandera azul.
Con su degradado que refleja el sol y el cielo, la bandera agrega una carga de luz al espacio y nos recuerda al vaivén del mar y al azul del cielo. Es más, estos reflejos azulados, que acompañan las luminarias, se vuelven envolventes y adquieren un valor simbólico del infinito, e incluso logran extenderse más allá del set hacia el exterior.
En esta composición aparecen también piezas coleccionadas por Arola y que provienen de sus viajes, lo que provoca un contraste entre las formas orgánicas de los objetos y la estructura fina de las lámparas.
Sobre una mente deslumbrante
Tras algunas lámparas icónicas, encontramos a Antoni Arola, (Tarragona, 1960) quien estableció su propio Estudi Arola en 1994, y su primera lámpara, llamada Nimba, fue editada por Santa & Cole en 1997. A partir de este punto, su pasión por la luz fue más allá y, además, ha logrado grandes reconocimientos, como el Premio Nacional de Diseño 2003.
Arola es todo un representante de su generación que inspira con sus obras que tratan la luz como materia fundamental. Sus diseños se nutren de su interés por contextos remotos, como las culturas africanas, otomana o japonesa, y plasman la elegancia y la sencillez, con un carácter muy poético.