Gracias a la cultura japonesa ahora el sushi no solo forma parte de nuestro vocabulario, sino que está integrado en la gastronomía e incluso hemos aprendido a comer con palillos. También desde que la nipona Marie Kondo se coló en nuestras vidas, corroboramos que deshacernos de lo que nos sobra y mantener nuestra casa en orden nos ayuda a ser más felices. El país del Sol naciente también nos ha dejado el legado de los jardines zen, que son un bálsamo eficaz para combatir el estrés de la vida cotidiana. Y ahora, llega una nueva revolución, las plantas huevo

 

¿Qué son las plantas huevo? 

También relacionado con el mundo de las plantas, pero aplicado al interior y a los hogares, ha llegado esta tendencia de Japón, que es perfecta para las casas pequeñas y minimalistas. Se trata de las plantas huevo o Eggling, como se conocen en inglés. Se trata de unas pequeñas macetas de cerámica con forma de huevo de gallina que albergan en su interior una mezcla de semillas y nutrientes que solo necesitan una pequeña ayuda por nuestra para crecer y convertirse en planta.

 

 

Dónde colocar y qué cuidados requieren las plantas huevo

Gracias a su reducido tamaño, las macetas pueden adaptarse a todos los rincones del hogar y son ideales para adornar cualquier espacio. Su cultivo es fácil, pues en su interior llevan turba, que es un preparado orgánico compuesto por residuos vegetales y nutriente que sustituye a la tierra, así como las semillas sembradas de las distintas especies vegetales que pueden crecer dentro del espacio reducido: desde el cactus (que es la opción más habitual) a la lavanda e incluso pequeñas fresas.

Para que la planta pueda crecer, solo hace falta romper el cascarón del huevo por la parte superior. Después, los únicos cuidados que requiere para que crezca es el riego y ubicarla en un sitio con luz. Pasados los cinco meses, cuando la planta alcance un tamaño más grande y ya no quepa en el huevo, habrá que trasplantarla directamente en tierra o a otra maceta más grande para que pueda seguir desarrollándose.

 

¿Cómo se crean las plantas huevo?

Son de gran popularidad en Japón donde se fabrican a mano con cerámica porosa blanca. Cada huevo mide 54 x 47,5 mm y viene con una bandeja de terracota y con un paquete de semillas adicional para asegurar el éxito. Hay ocho versiones disponibles: cuatro hierbas (albahaca, perejil italiano, menta, tomillo) y cuatro flores (crisantemo, lobelia, polemonio, petunia).