¿De dónde salen dichos componentes?
El humo del tabaco tiene un origen claro. ¿Y el resto? Muchos materiales utilizados en la construcción y fabricación de materiales que tenemos en casa pueden emitir sustancias nocivas de forma continuada en el tiempo, sobre todo cuando son nuevos. Las pinturas, barnices y los productos de limpieza también suponen una buena fuente de emisión de estos compuestos que, acumulados entre las paredes de nuestras casas, hacen que el aire no sea todo lo saludable que podríamos esperar. Este efecto se ve incrementado porque nuestras casas son elementos cerrados, con lo que dichos compuestos tienen mayor dificultad para salir al exterior y diluirse. De ahí la importancia de abrir un rato la ventana todos los días (incluso en invierno) para ventilar. Pero mi intención con este artículo no es alarmarte, ya que existe una solución sencilla, eficaz y a la mano de cualquiera para limpiar y renovar el aire del interior de casa: utilizar plantas.
Y es que además de decorar tu casa, las plantas cumplen una función purificadora a cambio de un poco de luz y agua y una buena dosis de cariño. Es más, en 1989, la NASA se dedicó a investigar qué plantas son las que mejor cumplen esta función. Sacaron un listado de unas 50, de las cuales, yo he seleccionado las más fáciles de encontrar y de cuidar y que, además, estuvieran en el top 10 de la lista. De esta lista, es recomendable escoger unas cuantas (o todas), ya que algunas son mejores para eliminar sustancias químicas específicas del aire que otras y así obtendrás un mayor rango de “limpieza”. Allá van