Si sigues estos pasos, encontrarás tu casa perfecta al volver de vacaciones

Las alfombras son uno de los principales focos de polvo de toda la casa. Por eso, cuando te marches de vacaciones, conviene guardarlas. Para hacerlo bien, primero debes lavar la alfombra en seco. Una vez esté limpia, quita las manchas aplicando una mezcla de bicarbonato de sodio y aceite esencial de lavanda. Por último, recuerda que, a la hora de guardarla, no debes doblarla; es mucho mejor que la enrolles. En la imagen, la Black Reversible de Charlotte Lancelot para Gan. 

Una simple y pequeña ventana que se queda mal cerrada puede ser la excusa perfecta para los ladrones para colarse en tu casa. Antes de marcharte, comprueba que dejas perfectamente cerradas todas las puertas y ventanas de la casa, por pequeñas que sean. En especial, si dan a patios interiores: son los favoritos de los cacos gracias a la discreción que implican para sus actividades. Ni que decir tiene que este gesto también bloqueará la entrada del polvo. En la imagen, ventanas de Velux. 

Antes de colgar el letrerito de vacaciones, dedica un día entero a cambiar todas las sábanas y toallas de casa para que, cuando llegues, disfrutes de un maravilloso descanso en una cama limpia y hecha. Para ello, acude a tu jabón favorito, que además de perfumar la cama también creará un agradable ambiente en toda la habitación. 

Es fundamental limpiar bien la nevera antes de marcharte, para no encontrarte sorpresas en forma de hongos a tu regreso. Limpiando bien la nevera y dejándola vacía y libre de materia orgánica, evitas manchas y malos olores. Además, si tienes una nevera moderna con separación de sistemas respecto al congelador, puedes apagarla o dejarla en 'modo vacaciones', mientras este último sigue funcionando; todo esto que te ahorramos en la factura. En la foto, nevera retro de Fagor electrodoméstico. 

Antes de irte de vacaciones, tienes que tener muy definidas las necesidades individuales de cada una de tus plantas. Si son de las que requieren poco riego, no es necesario que te preocupes por ellas, especialmente si estás fuera una semana o menos. Pero si tu ausencia va a ser más prolongada y, además, tus plantas necesitan de agua constantemente, debes plantearte asignarle a un amigo o a un vecino la función de regarlas. Puedes devolverle el favor haciendo lo mismo por él. 

Las lámparas son las grandes olvidadas cuando nos vamos de vacaciones. Nos iluminan, nos ayudan a generar atmósferas, pero nos cuesta detenernos en ellas y cuidarlas como se merecen. Antes de marcharte, pasa un plumero o un paño de microfibra por la pantalla, que atraiga el polvo en lugar de diseminarlo. Y recuerda repasar también los cables y las bombillas. Estas pueden perder hasta un 50% de su luz si están sucias. Terrible, ¿no? En la foto, la Parentesi roja de Flos. 

No hay nada más reconfortante que llegar de vacaciones y encontrarte una casa fresquita. Para ello, lo mejor es sacarle todo el partido a tu termostato inteligente. Con el nuevo modelo de Vimar, y a través de la aplicación View, puedes encender el aire acondicionado unas horas antes de llegar a casa, y así lograr una sensación más agradable cuando entras por la puerta. E incluso hacerlo por voz, a través de la integración con Amazon y Google.