"Las cosas no son difíciles de hacer, lo que es difícil es ponerse en situación de hacerlas", sentenció Constantin Brâncuși, pionero del arte moderno, en una frase en la que todos en algún momento podemos reconocernos, especialmente cuando requiere que echemos a volar toda nuestra creatividad e imaginación. Y redecorar nuestra casa demanda una dedicación que, sin duda, merece la pena. A veces, el cambio a nuestro hogar puede llegar a través de detalles, como cambiar el color de un mueble que se ha quedado desfasado o queremos que encaje armónicamente con el resto de piezas de otra estancia. Y para hacerlo, sin necesidad de ser expertos en restauración, la pintura a la tiza se presenta como una técnica rápida, fácil y económica que no necesita barnizado. ¿Te animas?
Experta en materia es Neus, Iserte, al frente de chalkpaint.es, que nos da las pautas para cambiar el aspecto de los muebles de Ikea fabricados con melamina.