Laminado, vinílico, hidráulico, madera maciza, porcelánico…: hay muchos tipos de suelos para la casa, pero ¿en qué hay que fijarse al elegir uno? ¿Es mejor un suelo versátil o merece la pena centrarse solo en el precio? Para la arquitecta Mamen Iglesias, socia del estudio Reformmia, especializado en reformas integrales y diseño, "la elección del suelo ha evolucionado en paralelo a los sistemas de climatización; con el porcelánico como el suelo más elegido para la instalación de sistemas eficientes con suelos radiante-refrescantes". Hablamos con ella sobre qué es importante tener en cuenta hoy a la hora de elegir el suelo de casa y cuáles suelen instalar desde Reformmia en las casas que renuevan.

Suelo de madera de formato grande.

Suelo de madera de formato grande.

Eugeni Pons

Lo más importante es elegir un suelo funcional

Para la arquitecta, en cada proyecto entran en juego diferentes factores a la hora elegir el suelo de la casa. "En nuestro caso, tiene mucha importancia la funcionalidad; es decir, que sea el suelo idóneo para el sistema de climatización previsto, que se adecue al tipo de estancia en el que se vaya a colocar, que conlleve poco mantenimiento para favorecer su durabilidad en el tiempo y que sea confortable". La estética también lo considera un factor importante, y aclara que prefiere optar siempre por tonos neutros que estén en consonancia con el resto del proyecto.

La sostenibilidad es un aspecto cada vez más importante al elegir el suelo de casa.

La sostenibilidad es un aspecto cada vez más importante al elegir el suelo de casa.

Entrance Makleri

Sostenibilidad y salud: dos aspectos que cada vez importan más a la hora de elegir el suelo

La sostenibilidad es otro de los aspectos relevantes a la hora de elegir el suelo de casa porque los propietarios son cada vez más conscientes de su responsabilidad medioambiental. Así, en general, se demandan suelos cuya fabricación sea respetuosa con el entorno y, así, los suelos reciclados están cada vez más de moda en el hogar. Las maderas provenientes de bosques sostenibles o las maderas de crecimiento rápido, como el bambú o el abeto, están asimismo entre las opciones más demandadas para la casa.

El corcho es una opción en auge en suelos, pero también en revestimientos.

El corcho es una opción en auge en suelos, pero también en revestimientos.

Lorenzo Zandri

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El corcho es otro de los materiales que está de moda como suelo o revestimiento para el hogar. ¿Las razones? Se trata de un material natural y reciclable, cuyo proceso de fabricación no contamina y que, además, tampoco genera residuos. Económico y disponible en diferentes formatos, el corcho es un material cada vez más popular en baños y cocinas por su calidez, resistencia a la humedad y características antideslizantes. Desterradas, sobre todo en interiores, quedan maderas tropicales como el ipé, el iroko o el wengué, que además son bastante más caras que las que te proponemos. Otro aspecto importante tiene que ver con que los suelos sean saludables; es decir, que no emitan compuestos orgánicos volátiles.

Salón- comedor con suelo porcelánico.

Salón-comedor con suelo porcelánico.

María Pujol

El suelo porcelánico requiere poco mantenimiento y la madera aporta calidez

"Actualmente, los suelos que más estamos instalando tanto en reformas como en proyectos de obra nueva son los porcelánicos –apunta Iglesias; sobre todo cuando los sistemas de climatización son por suelo radiante-refrescante porque estos suelos tienen una buena inercia térmica. Además, son muy resistentes, apenas requieren mantenimiento y se pueden encontrar en una gran variedad de acabados y formatos", continúa.

El suelo porcelánico apenas requiere mantenimiento.

El suelo porcelánico apenas requiere mantenimiento.

D.R.

La arquitecta también asegura que en las reformas en las que el sistema de calefacción es central prefieren instalar suelos de madera, que dota de calidez al espacio, aunque recurren al porcelánico en zonas húmedas de la casa, como baños y cocina. Finalmente, reconoce que ya existen suelos laminados que han mejorado mucho su resistencia al calor y el agua, convirtiéndose en una alternativa más económica.