NO cuelgues tus cuadros en la pared, apóyalos: 9 ideas (con FOTOS) para un piso con mucho estilo, buen gusto y moderno

1. Cuadros apilados en el suelo

Una pared lisa y vacía se puede llenar de vida con solo unos cuantos cuadros en el suelo. Al final, no es imprescindible contar con un mueble para que los apoye, basta con tener una pared y suelo. Lo cierto es que queda ideal un conjunto de cuadros amontonados, de diferentes medidas y con un papel destacado para los más grandes. 

En el caso de disponer de un único cuadro, lo suyo es que sea también de buenas dimensiones para que cubra una porción importante de la pared y pueda vestirla con encanto.

En este caso, tenemos un apartamento de A Coruña que se luce con el arte de una multitud de cuadros de Nomad Interiors. Estos descansan entre el suelo y la pared, y juegan con sus distintos tamaños y diseños, así como enmarcados o no.

2. En tu zona de trabajo

Una magnífica idea que te encantará, sobre todo, si trabajas o estudias en casa, es disponer de un cuadro, no necesariamente de gran tamaño, sobre tu escritorio. Te dará esa pizca de entorno agradable que necesitas para animarte a pasar horas delante de un libro u ordenador, y más aún si delante solo tienes las vistas de una pared. Puedes incrementar tu gusto por este espacio, y que el tiempo se haga más ameno, añadiendo algún otro elemento decorativo, como un jarrón con flores, por ejemplo.

3. Descanso en las cómodas

Las cómodas, curiosamente como su nombre indica, son muy cómodas para el descanso de los cuadros. Además, su anchura permite la incorporación de otros objetos que aporten más a la decoración del hogar, así como pueden ser unos jarrones.

El comedor es un espacio perfecto para los cuadros, de modo que puedes apreciar su belleza y embobarte en su profundidad de la misma manera que lo harías mirando la televisión. Puede incluso propiciar el diálogo y ser un espacio lleno de tranquilidad.

5. Sobre una repisa, como la del cabezal

Las repisas son nuestras gran aliadas para añadir elementos decorativos y objetos útiles en nuestra vida cotidiana. Contienen un espacio que se tiende a desaprovechar, como es en el caso de la repisa del cabecero del dormitorio. Te proponemos así usarla para apoyar algún cuadro que encaje con tu estilo y te identifique, e incluso alguna otra pieza, como una pequeña planta. De esta manera, podrás lograr una habitación que se sienta como tu refugio y el reflejo de tu interior.

6. En cualquier espacio y soporte, como en el baño

Si nos preguntas en qué lugar es mejor colocar un cuadro, la respuesta es simple: prueba, ensayo y error. El baño puede parecer un lugar un tanto extraño para un cuadro, pero ya te adelantamos que no. Puede darte ese toque de originalidad y personalidad que buscas en tu hogar para sentirlo tuyo. Puedes probar, como en esta fotografía que te mostramos, a apoyarlo encima de tu bañera.

La idea es que combine con el resto de decoración, en este caso el marco de madera va en sintonía con otros elementos del mobiliario, y lo mismo ocurre con la tonalidad en blanco y negro de la imagen.

7. En estantes de obra y de reducidas dimensiones

Como se suele decir, menos es más. Aquí también puede ser tu lema, ya que puedes incluir tan solo un par de cuadros pequeños en estantes para ofrecer una pincelada más a la decoración de tu estancia, así como en tu comedor. 

Si tienes un espacio para ellos que se adapte al entorno y estilo escogido, como una estantería de obra, conseguirás un efecto elegante y sencillo, algo que siempre es una excelente sensación a transmitir del hogar. 

8. Sobre un taburete e incluso de recibidor

Si tienes pocos metros cuadrados y muebles pequeños para colocar un cuadro, tenemos una idea refrescante para tu casa. Puedes optar por un cuadro en formato vertical y que su soporte sea un simple taburete.

Con este concepto puedes crear un espacio propio que puede servirte de recibidor si buscabas uno peculiar, con tu sello y diminuto. Si quieres, agrega algún extra, como un jarrón o libro, para complementar la decoración de este espacio y que siga siendo único. 

9. La cocina, un espacio para ambientar

La cocina, como una estancia del hogar que es, también permite incluir cuadros y objetos decorativos. En este caso, te mostramos la cocina del estudio Yakusha Design, que sigue un diseño minimalista en el que se ha optado por un par de cuadros con una misma temática y estilo, que combinan con el mobiliario, así como con la cómoda que los aguanta, y una pieza decorativa.