Nada en esta vida es eterno, pero dado nuestro amor por las piezas de mobiliario, casi siempre tratamos de alargar su longevidad lo máximo posible. Por supuesto, todo dependerá de la calidad del material del que estén fabricados, así como del mantenimiento y cuidado que les demos.
Si quieres quieres que los muebles de tu casa tengan una larga vida en perfecto estado, hay una serie de medidas que podemos tomar. Así lo corrobora la interiorista Bárbara Aurell, de Espacio en Blanco, que considera clave apostar por el diseño a la hora de adquirir una pieza de mobiliario. "Los muebles duran cuando están bien hechos", asegura esta experta que considera primordial que haya un buen diseño detrás, "sea por nuestra parte en un mueble a medida o de un buen fabricante o diseñador para un mueble prescrito".
Funcionalidad y disfrute
Para alargar su vida lo máximo posible, antes de adquirir una pieza, Aurell invita a reflexionar sobre la funcionalidad y sobre cómo viven las personas que van a disfrutarlo. "Según su forma de vivir, adaptaremos, tanto si es un mueble diseñado o comprado, el mueble a las personas. Un claro ejemplo: ahora está de moda poner mesas de hormigón blancas. Si una familia tiene niños pequeños y suelen hacer vida en el salón, no es una buena idea ya que cualquier mancha de un color al pintar o de una salsa de tomate al hacer noche de peli y pizza va a quedar marcado y va a ser difícil de limpiar. Se ha de pensar muy bien el uso de cada pieza y entender muy bien que lo importante es que las personas que vivan en ese salón se sientan a gusto y libres de disfrutarlo", aclara.
Los cuidados imprescindibles
Para que los muebles duren más tiempo, para Rosa Zapater, general manager de Bonart Interior Design es esencial "tenerles cariño y mimarlos. Los muebles nos aportan el equilibrio y la funcionalidad en nuestro hogar con lo que no hay que desestimarlos y ser cuidadosos con ellos. Su cuidado varía según diversos factores, como el material con el que esté hecho el mueble, si son tapizados, de madera, de metal, piedra o cristal. por ejemplo, y si son muebles de interior o de exterior. También importante seguir las indicaciones del fabricante".
Para aprender a mantener los muebles de tu casa en perfecto estado y que duren muchos años como nuevos, Zapater comparte sus consejos de experta:
La luz de sol
"La luz del sol estropea y se come el color tanto de la madera como de los tejidos", por eso no debes dejarlos expuestos a los rayos solares salvo que estén pensados para espacios exteriores, ya que están fabricados de una madera más resistente a los rayos ultravioletas. Si este es tu caso, igualmente asegúrate de barnizarlos.
El agua
"La humedad y el agua también deterioran los muebles". Hay que evitar que tus muebles hagan contacto con el agua y que estén muy cerca del aire acondicionado porque el aire frío irá deteriorando la madera.
Textiles
"Utiliza manteles en las mesas para protegerlas de los cercos de los vasos o los platos calientes".
Manipulación
"Cuando hay movimiento o mudanza, se debe tener cuidado de no arrastrar los muebles y manipularlos con cuidado".
Limpieza
"La limpieza es muy importante. No se deben usar productos específicos para la limpieza de los muebles ya que dejan una capa sobre ellos que elimina el aspecto natural". Quizá has oído hablar que el amoniaco es perfecto para conservar la madera, pero es todo lo contrario: la daña. Por eso, cuando veas que un producto de limpieza para muebles incluya amoniaco no lo compres, porque después de un tiempo hará que la madera pierda el brillo y se deteriore.
"Limpiar las manchas en el momento en que se producen facilita la labor y reduce el riesgo de arañar el material".
"En general aconsejo la limpieza con agua caliente usando un paño muy escurrido y detergente neutro diluido un 30% con agua para productos de chapa sintética y lacados. Para maderas raw ( tratadas al aceite ) solo recomiendo usar un paño de algodón y detergente rápido Osmo. En el caso de acabados de piedra o mármol, lo más efectivo es usar agua caliente y un paño con detergente neutro. Los muebles de resina cemento se limpian con agua caliente y un paño suave con detergente para vidrio. Los acabados en metal se limpian con agua tibia y jabón neutro y se secan con un paño limpio y suave”.