Los destinatarios de esta casa minimalista en Dubái es una pareja de treintañeros profesionales de la informática que abre un nuevo capítulo en su vida. La reforma integral, liderada por Neeshay Nouman, de The Niche Corner, consistió en reorganizar los espacios e introducir una paleta de colores y materiales suave, sobria y natural, con muchos toques de madera para aportar calidez.
"Mis clientes querían un 'hogar para siempre', una morada que les concediera serenidad y paz, con una estética imperturbable", recuerda la diseñadora de interiores. "Congenié con ellos de inmediato; saben apreciar el diseño minimalista".
En total, son 297 m2 distribuidos en cuatro dormitorios, cuatro cuartos de baño, un salón, un comedor y una cocina, todo ello en dos niveles. El salón, la cocina y el comedor ocupan un único espacio. La vegetación del jardín desempeñó un papel importante. El equipo de diseño trajo de Marruecos un espectacular olivo de más de 70 años, que se ha colocado en el centro del gran ventanal del salón. "Hubo que transportarlo en helicóptero y colocarlo con una grúa desde lo alto de la casa", cuenta Neeshay.
Dada la naturaleza minimalista del proyecto, se apostó por los tejidos especiales, entretejiendo linos, tweeds y algodones ligeros. "Hay textura incluso en la campana de la cocina y en el mueble del televisor", revela. Un cuarto de baño grande se dividió en dos más pequeños, creando dos cuartos de baño separados en dos dormitorios de invitados. "Fue uno de los mayores retos", concluye Neeshay Nouman.