El dibujo, para Alvaro Siza, "está ligado a una especie de placer". Tal vez por eso, la exposición Bocetos: Alvaro Siza en el FIG (Festival Internacional de Grabado) de Bilbao haya levantado tanta expectativa. Alvaro Siza, el arquitecto de la pureza, expone a partir del 23 al 26 de noviembre su trabajo más íntimo, más personal. Aquel que ha ido desarrollando a ratitos, en la sala de espera de un aeropuerto o en una noche de insomnio.
La crítica de arte Maria João Fernandes describe así la faceta más artística de Siza: "En sus dibujos, la línea convulsa o dócil esboza los gestos de la vida cotidiana, el encuentro, la lucha y el desencanto, el ocio y el placer, la sutileza del cuerpo, desnudo o vestido, cruzando el espacio de la mirada como un meteorito y descansando allí por un instante, dulzura y dramatismo, vértigo silencioso, relámpago que conecta la vida y la muerte, presencia y ausencia".
El Palacio Euskalduna de Bilbao acogerá esta muestra inédita que coincide con el 90 aniversario del arquitecto portugués, ganador del Premio Pritzker (1992) y del Premio Nacional de Arquitectura (2019). En España, es autor de importantes edificios como el edificio Zaida en Granada o el Centro Metereológico en la Villa Olímpica de Barcelona.
La exposición de Siza es uno de los platos fuertes de la 13a. edición, de la feria de grabado y arte sobre papel más importante al sur de Europa y que este año cuenta con un país invitado con mucha tradición en este campo: Japón. Otras citas imprescindibles del FIG son la exposición sobre Tsukioka Kōgyo, un artista que se especializó en dibujar los más célebres dramas del teatro noh: su solemne atmósfera, los delicados movimientos de los actores, sus máscaras y sus lujosos kimonos; o una charla alrededor de Eduardo Chillida coincidiendo que en 2024 se cumplen 100 años del nacimiento del escultor.
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