Aunque sus nombres puedan intimidarte, lo cierto e que las plantas colgantes son fáciles de reconocer. Son aquellas cuyos tallos no son erguidos y pueden convertirse en la mejor arma de seducción de tu casa. Como no pueden sostenerse por sí mismas, este tipo de plantas desarrollan diferentes formas, creando circuitos naturales, a cuál más original y expresivo. Además limpian el aire, reducen el estrés y aportan sensación de bienestar. A cambio, solo piden que las sitúes en un lugar favorable y que las riegues –ni mucho ni poco–. Verás cómo sus ramas crecen largas y gruesas, ofreciendo un espectáculo de luz y de vida.

 

1 /10
Planta del Rosario o Senecio Rowleyanus

Planta del Rosario o Senecio Rowleyanus

El Senecio Rowleyanus necesita de pocos –aunque necesarios– cuidados para existir. Como es capaz de almacenar el agua en sus hojas en forma de bolitas, no necesita demasiado riego. Es más, se recomienda dejar secar la tierra entre riego y riego. Feliz con el sol, puede florecer en primavera, alegrándote con sus pequeñas flores blancas. 

 

Potos

Potos

De la familia araceae, es una de las plantas más resistentes. Según estudios realizados por la NASA, el poto, potos o potus absorbe formaldehído, xileno y benceno, tres sustancias tóxicas que es mejor eliminar de la atmósfera del hogar. A la hora de cuidarlo, no te planteará problemas, ya que se conforma con unas atenciones básicas. Ni mucha luz, ni un riego constante.

Tradescantia zebrina

Tradescantia Zebrina

Esta bonita planta de interior se identifica por sus hojas moradas, así que puede convertirse en el contraste perfecto si el resto de tus plantas son verdes. La Tradescantia Zebrina, cuyo nombre parece un trabalenguas, prefiere estar en un ambiente un poco sombrío y húmedo; necesitarás regarla frecuentemente para que su tierra esté siempre húmeda, pero evita encharcar sus raíces.

Helecho

Helecho

El Helecho es una de las plantas colgantes de sombra más efectivas, ya que sus largas y frondosas hojas decoran de forma inmediata cualquier estancia. Esta planta de interior es amiga de la humedad, por eso se siente a gusto en lugares sombríos. Riégala a menudo si quieres que te ofrezca su mejor versión.  

Clavel del aire o tillandsia

Clavel del Aire o Tillandsia

El Clavel del Aire o Tillandsia no se nutre de la tierra, sino del aire, por eso hasta los menos experimentados en el cuidado de plantas pueden disfrutar de ella. Aunque prefiere un clima húmedo, no soporta las heladas y el frío, por eso te recomendamos meterla dentro de casa cuando comience a atardecer o bien buscarle un lugar dentro de casa en los meses de invierno si vives en un clima especialmente frío. 

 

 

Hoya Carnosa flor de cera

Hoya Carnosa o Flor de Cera

Esta flor te puede dar alegrías si sigues estos sencillos pasos: en primavera y verano, colócala en un lugar soleado y luminoso, evitando el sol directo para que el follaje no se queme, regándola habitualmente. En invierno, asegúrate de que recibe una luz brillante y aliméntala solo una vez al mes, cuando el suelo esté bastante seco. En esta época están relativamente inactivas. 

 

Hiedra-Helix-Eva

Hiedra Helix Eva

Reconocerás la Hiedra Helix Eva por sus hojas verdes con un fino marco en un tono más claro. Como planta colgante, aporta valor decorativo a cualquier rincón de la casa. Si eres constante y la vas podando y vas dándole forma, puede llegar a crecer entre 20 y 40 metros fácilmente, y en menos tiempo del que te imaginas. 

 

 

Rhipsalis pulchra

Rhipsalis Pulchra

La luz indirecta brillante es la mejor medicina para la Rhipsalis Pulchra. Su masa peluda de tallos delgados y ramificados puede estar ocasionalmente salpicada de pequeñas flores y, más adelante, de bayas. Para estimularla, asegúrate de que esté en un lugar luminoso de la casa. En primavera y verano, riégala cuando la tierra se seque, pero sin que se asiente en exceso de agua durante un período de tiempo prolongado. 

 

Aeschynanthus-Rasta. Aeschynanthus Rasta

Aeschynanthus Rasta

Las hojas de la Aeschynanthus Rasta se enroscan, formando rizos y aportando valor decorativo a cualquier espacio. A esta planta le encanta la luz brillante indirecta –que no el sol directo–. Riégala cuando la tierra empiece a secarse y recorta sus tallos cuando empiecen a crecer de forma arbitraria; te ayudará a darle forma y crecerá más frondosa. Perfecta si tienes mascotas o niños pequeños. 

Petrea volubilis

Petrea Volubilis

La Petrea Volubilis, comúnmente conocida como Corona de la Reina, es una enredadera que crece hasta los cuatro metros de altura en posición abierta, o puede convertirse en una planta trepadora con tallos de hasta 12 metros de largo. Los tallos se enroscan alrededor de otras plantas como soporte. Las lóbulos del cáliz con forma de pétalo persisten mucho después de que caigan las corolas.