Sylvester Stallone ha puesto a la venta su mansión en Beverly Hills. La estrella de Rocky compró el terreno a finales de la década de 1990 por una cantidad no registrada y pronto construyó una majestuosa mansión de ocho dormitorios y 12 baños que a comienzos de año puso a la venta por un precio de 110 millones de dólares y ahora ha rebajado a 85. La casa de la que el tres veces nominado al Oscar quiere desprenderse es la más famosa y simbólica de su patrimonio, ya que es allí donde tiene su tesoro privado: una habitación con cientos de estanterías iluminadas donde se exponen todos sus recuerdos relacionados con Rocky Balboa.  Incluso hay una estatua de tamaño natural del actor como Rocky con sus manos enguantadas levantadas en señal de victoria de pie frente a una ventana.