Una interiorista renueva su propio piso en Barcelona con una cocina poco convencional como centro de reunión

Esencia modernista

Después de la intervención, la vivienda sigue conservando los elementos que definen su carácter modernista, como los suelos hidráulicos de mosaico, las molduras y relieves en los techos y las ventanas y puertas de madera. Para acompañarlos, la interiorista ha elegido materiales como la madera y el mármol natural, que aportan calidez y equilibrio que compiten ni les restan protagonismo, sino que aportan coherencia. 

"Los elementos originales del diseño modernista del piso forman parte de su encanto atemporal, y queríamos asegurarnos de que siguieran siendo protagonistas en el espacio renovado", dice Camilleri.

Una cocina de madera

Para ganar amplitud visual y favorecer la circulación, toda la zona de día se ha integrado en el mismo espacio. Cubro firma la cocina, que tiene un acabado en madera de cerezo y se ha concebido como una extensión natural de la zona de estar. Abierta al salón y al comedor, se integra en un área amplia y sin barreras.

El corazón de la casa

La cocina es el corazón de la casa. Es el centro aglutinador de los habitantes de la casa durante el día y también cuado van amigos. "Desde el principio, quisimos que la cocina tuviera un rol protagonista en nuestra zona de día, pero sin que diera la sensación de ser una cocina convencional. La idea era que se fusionara con el salón y el comedor, creando un espacio fluido y acogedor. Optamos por una distribución que permite delimitar las áreas sin necesidad de paredes ni separaciones físicas, haciendo que todo el espacio se sienta conectado y permitiendo que cada uno esté a su aire, pero siempre juntos", explica Camilleri.

Espacios fluidos

La combinación entre lo clásico y lo actual genera una atmósfera serena y coherente. La redistribución favorece la entrada de luz natural y crea una circulación fluida entre estancias, aportando una nueva lógica al uso cotidiano.

Una zona común para ser vivida

"Buscábamos conseguir la máxima amplitud y funcionalidad, asegurándonos de que cada rincón tuviera una función tanto práctica como estética. Nos interesaba especialmente fusionar elementos contemporáneos dentro de un entorno de arquitectura clásica, logrando un equilibrio entre la tradición y la modernidad sin perder la esencia del lugar", cuenta la interiorista.

Ambientes marcados

En la zona común, los ambientes quedan delimitados por el mobiliario y su disposición, más que por divisiones físicas.

Dormitorios serenos

En los dormitorios, se opta por una paleta suave y una distribución flexible, capaz de acompañar los cambios que trae cada etapa. Un requisito importante, ya que actualmente en la casa, la diseñadora de interiores vive con su pareja y su hijo, pero pronto serán cuatro, ya que Amina está a punto de dar a luz a su hija.  

Colores tierra

En el dormitorio se ha optado por un panel de cabecero de tonos tierra, una apuesta que aporta calidez a la estancia más íntima de la casa. 

Baño monocolor

Camilleri trabaja en Vive Con Gracia, un estudio especializado en la reforma de inmuebles "con un enfoque que equilibra el respeto por los elementos y materiales originales con una redistribución inteligente del espacio", tal como explica. Sus proyectos apuestan por el color y la personalidad, "inspirándonos en la elegancia del diseño inglés, pero fusionándolo con materiales más´s neutros que aportan calidez y serenidad", dice sobre los elementos diferenciales de su trabajo que ha replicado en el cuarto de baño de su propia vivienda.