Estas son las casas más caras (y excéntricas) del mundo

'The One' es una exclusiva mansión en Bel Air que tiene los mismos baños que habitaciones (20) y un sinfín de excentricidades más: piscina infinity, sala de cine, jacuzzi, gimnasio, salón de belleza, discoteca privada, bolera, casino, cinco ascensores interiores y un garaje con 30 plazas de aparcamiento. Ha sido diseñada por el arquitecto Paul McClean, lleva construyéndose 7 años y ahora sale a la venta como la mansión más cara de EE.UU.

'Le Penthouse' es un impresionante apartamento de cinco pisos en el corazón de Manhattan. Ubicado en la parte superior de la torre diseñada por Karl Fischer de 33 plantas, incluye  una piscina infinity en la azotea, once habitaciones y 14 baños, y por supuesto, gozar de las impresionantes vistas del horizonte de Manhattan.

El edificio 'Antilia' se encuentra en la prestigiosa calle Altamount Road de Mumbai, un rascacielos en el que vive solo la familia Ambani y que terminó de construirse en 2010. Tiene un total de 27 pisos (aunque de altura podrían ser 60), un teatro con capacidad para 50 personas, un salón de baile, varias piscinas, estudios de yoga y de baile y un piso completo dedicado a los helados. Además, también posee una sala de nieve, una increíble habitación que escupe copos de nieve artificiales las 24 horas.

La casa de vacaciones de Pierre Cardin, Le Palais Boules o Bubble Palace, se lleva la palma al diseño más extravagante. Proyectado en 1975 por el arquitecto húngaro Antii Lovag, este grupo de macetas rosadas o burbujas  con vistas al brillante Mediterráneo cerca de Cannes, tardó 14 años en construirse. Cardin, compró el complejo en 1992 al industrial francés Pierre Bernard y lo puso a la venta en 2017 después de una restauración de cinco años a crago de la arquitecta Odile Decq. 1200 metros cuadrados encaramados sobre un acantilado, 10 habitaciones, varias piscinas y cascadas, un anfiteatro con 500 asientos esta construcción es todo un hito surrealista. Se ha convertido en el sitio favorito de veraneo del diseñador Jacquemus y fue elegida como localización por la maison Dior para presentar en 2016 su colección Crucero.

Construido en 1680, la residencia principal de Hackwood Park en Hampshire cuenta con 24 habitaciones y 20 baños y está rodeada de campiña. El secreto rodea la venta de la casa: todo lo que se sabe del propietario actual es que es un multimillonario extranjero que ha llevado a cabo una restauración sustancial de la propiedad. Toda una recreación de la vida señorial del siglo XVIII.

Este ático en el dificio Woolworth en Manhattan, sería sin duda la residencia perfecta para un urbanita sin miedo a las alturas. Ubicado en el pico verde, puntiagudo y revestido de cobre del rascacielos neogótico, este ático ocupa los cinco pisos superiores del emblemático edificio y cuenta con un observatorio aéreo con vistas de 360 grados de la ciudad. Hay un ascensor privado que comunica los cinco pisos, y una piscina original del sótano de F.W. Woolworth o la suite de entretenimiento Gilbert Lounge, la bodega y la sala de degustación del piso 29 del edificio.

La Casa Encantada de Bel Air es una de las más famosas de la lujosa zona de los Ángeles. Data de la década de 1930, tiene 60 habitaciones, sala de cine, pistas de tenis, piscina y mucho más. Entre las personas que han sido propietarios de esta finca destaca el magnate Conrad Hilton, fundador de la marca de hoteles Hilton.

En pleno corazón de Londres está Kensington Palace Gardens, una de las calles más caras de Reino Unido y del mundo. Una mansión con piscina cubierta, 12 habitaciones, baños turcos y pista de tenis, su propio centro de salud y un museo de automóviles privado. Perteneció al director ejecutivo de Fórmula 1 y en la actualidad está regenteado por el multimillonario ruso Roman Abramovich, conocido por ser el dueño del Chelsea de la Premier League.

¿Por qué comprar un viñedo en Napa Valley cuando puedes cultivar tus propias uvas en medio de Beverly Hills? Palazzo di Amore, es una finca de estilo toscano que tiene absolutamente de todo: bolera, sala de cine, discoteca, pista de baile giratoria y aparcamiento para más de cien coches. Para vivir la dolce vita americana.

Acaba de venderse y ostenta el título de la casa más cara del planeta. La histórica Villa Les Cedres en la Riviera Francesa, ha pasado de manos del magnate de licores Campari a un multimillonario ucraniano. Construida en 1830, la villa perteneció al rey belga Leopoldo II,  cuenta con 14 habitaciones y 1700 metros caudrados, pero sobre todo destaca por su biblioteca con un extensísimo catálogo y un jardín botánico de 14 hectáreas (el jardin privado más grande del mundo).