En su camino por lograr viviendas cada vez más sostenibles, la arquitectura ha encontrado a un nuevo aliado. Se trata de las superficies translúcidas, que cada vez se están haciendo más presentes en las viviendas contemporáneas llamadas a convertirse en los nuevos modelos de construcción.

¿Dónde se puede ver arquitectura translúcida?

Esta solución está causando furor en lugares remotos como Japón, pero también ha llegado a España en propuestas tan atrevidas y divertidas como la casa-estudio de un pintor en La Berzosa, diseñada por Idearch Studio. "Quiero un estudio donde poder vivir, no una casa donde poder trabajar", pidió el pintor a los arquitectos, que respondieron a la demanda con esta espectacular joya con las paredes y el techo translúcidos, donde la luz campa a sus anchas.

Casa y estudio para un artista en La Berzosa, por Idearch Studio. La fachada busca relacionarse con los árboles del entorno cercano.

¿Cuáles son las ventajas de una casa translúcida?

Y es que esta es una de las mayores cualidades de las superficies translúcidas: iluminan y alegran la casa, aumentando la sensación de vivir conectados a la Naturaleza. La exposición a los elementos exteriores ayuda a que el aliento de la vida natural se asiente y florezca. Y un nuevo espacio adquiere protagonismo: el porche, o lo que los especialistas aciertan en llamar el neoporche, un territorio intermedio que agradece estas inundaciones de luz natural y de aire. Este neoporche carece de vallas o de un borde rígido: es más bien una zona abstracta, sin una definición intencionada; una plataforma sin contenido en la que organizar encuentros o bien casuales o bien programados.

La Deformed Roof House, de Furano by Yoshichika Takagi + Associates in Furano, en Japón.

¿Por qué decir sí a lo translúcido?

Apostar por superficies translúcidas permite a los profesionales profundizar en las propiedades de materiales menos conocidos pero muy válidos como el policarbonato. Perfecto para puertas, ventanas o marquesinas, este material se está postulando como una interesante alternativa al cristal –mucho más pesado– y presenta tanta resistencia a la rotura y al deterioro que se ha convirtido en uno de los favoritos de los arquitectos que ponen en el centro de su trabajo el bienestar de la familia a corto y a largo plazo.

Visto desde fuera, orbes brillantes, suaves y serenas pulsan detrás de una lámina, insinuando cálidos momentos sociales en el interior. Con su naturaleza, estas casas deshacen la lógica un poco retrógrada de refugio o de retiro a favor de fomentar una simbiosis duradera entre el territorio y el "intruso", que invita a cada uno a ser mayordomo del otro. Una tendencia que va camino de convertirse en más y más visible.