La Sala Canal de Isabel II (Sta Engracia, 125) presenta “David Delfín”, una visión global de la trayectoria de este diseñador, en la que se analizan sus claves a la hora de diseñar y plasmar ideas en las prendas, a través de sus influencias, su inconfundible estilo, su gama cromática y su cuidado patronaje.

Uno de los miembros más activos de esa nueva cultura underground madrileña, la postmovida.

Gratuita, esta muestra pretende ser un homenaje, precisamente en el año en el que Delfín cumpliría 50 años de vida y 20 años en activo como diseñador.
Diego David Domínguez González (Ronda, 1970 – Madrid, 2017), más conocido como David Delfín, representó como ningún otro el surgir de una nueva generación de jóvenes creadores que llegaron con la entrada del milenio, y que concibieron la moda de una manera interdisciplinar.

Dos de los diseños incluidos en la retrospectiva. Forman parte del polémico desfile en el que tenía como referencias a Luis Buñuel o René Magritte.

Por si fuera poco, David hizo de su proyecto DAVIDELFIN una plataforma colectiva en la que convivieron diferentes formas de expresión artística, como la fotografía, la performance, el vídeo, la música y la moda. Recordamos un jersey con su tipografía característica en el que se leía: Fashion is more arte than art is. Y es que la creación de prendas que dialogaran con discursos artísticos (con un trabajo inspirado en artistas como Joseph Beuys o Louise Bourgeois) fue una de sus señas.

También fue el encargado de la dirección de arte del disco de Miguel Bosé, Papito, dirigió vídeos para grupos musicales como Fangoria, coordinó la parte artística del programa de televisión Noche Hache (Cuatro) y colaboró con firmas como Levi's o Converse.

Motivos más que suficientes para que merezca una celebración.

David consiguió definir y defender un estilo inconfundible que le hizo único en la pasarela española.

La muestra, comisariada por Raúl Marina, se articula en torno a la trayectoria de David Delfín, partiendo de Sans Titre (1999), su primera colección no planteada como tal, sino como un ejercicio pictórico en busca de nuevos soportes, pasando por la polémica Cour des Miracles (primavera/verano 2003), hasta llegar a su momento de plena madurez creativa en las sucesivas colecciones.

Asimismo, la exposición quiere ir más allá de la moda, a través de bocetos, escritos personales y material de trabajo de su archivo íntimo, vídeos y fotografías que desarrollaba junto sus colecciones demostrando ese carácter interdisciplinar.

Falleció en 2017 por las consecuencias de tres tumores cerebrales que le fueron diagnosticados un año antes, casi a la vez de que fuera galardonado como Premio Nacional de Moda 2016: "ha logrado traspasar las barreras entre la moda y el arte, los géneros y las generaciones, lo comercial y lo artístico", según explicaba el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Nada más que añadir.