Cada vez se pasa más tiempo en el baño, cada vez están más llenos de objetos, y disponerlos y ordenarlos todos se convierte en un auténtico reto, sobre todo cuando no abundan los metros cuadrados. Las principales firmas del sector responden a este desafío desarrollando modelos que sirven a todas las necesidades. 

Xavier Torras, director de comunicación de Roca, afirma que desde su empresa apuestan por "un mobiliario que combina los cajones grandes en lugares accesibles para los recipientes más voluminosos con los cajones pequeños con separadores para depositar el material más delicado en las zonas superiores". Este lugar de la casa ha dejado de ser un espacio puramente funcional.

Línea Cult, de Vipp, en la que los módulos de almacenaje aumentan o disminuyen de tamaño dependiendo de las necesidades

 

Por eso los muebles no solo deben responder a las demandas de almacenaje, sino también a las inquietudes estéticas. "Muchas veces dejamos cajones abiertos para poder poner una planta o bien un dispensador de aromas. Al final, lo que se busca es que sea práctico y bonito, que resulte cómodo tanto para los usuarios habituales como para las visitas", resume. El baño, como el resto de la casa, está en constante metamorfosis.

 

 

Y como dice Daniela Santos en su libro, "quizá no exista una fórmula milagrosa para mantener todo en su sitio, pero existen múltiples soluciones adaptadas a las circunstancias de cada persona o familia que facilitan tremendamente la tarea de la organización". Porque lo que le funciona y satisface a un single, no tiene por qué resultar práctico para una pareja con hijos. Y lo que es válido e, incluso, inspirador para una mente creativa y flexible puede ser una especie de pesadilla para alguien con una estructura mental más formal y estructurada. Al final, el orden en casa se resume en encontrar una linterna a la primera cuando se produce un apagón, y que, además, tenga pilas. Tan sencillo y tan complicado como eso.

 

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Una vez tengas el baño ordenado, el objetivo es no tener que ordenarlo una y otra vez. Para ello, existen pequeños trucos a los que puedes acudir y que constituyen el ABC de los expertos. Conviene dejar a la vista solo lo básico; esto significa que, después de utilizarlo, cada producto debe volver a su lugar. Es recomendable, asimismo, evitar los excesos –no olvidemos que nos encontramos, probablemente, en la habitación más pequeña de la casa– por ejemplo, resulta más práctico y estético tener las toallas justas y necesarias para el uso diario y poner el excedente en otro lugar de la vivienda, o, si lo hay, el armario de la ropa blanca. 

 

 

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El director de comunicación de Roca intenta trasladar a su casa los valores que defiende su marca. "Los baños son lugares en los que suceden más cosas de las que pensamos: puedes estar leyendo o relajándote, así que, además de los muebles puramente funcionales,  está bien contar con objetos de decoración que den
un añadido de confort".

 

Línea Inspira de Roca

El material del que están hechos los muebles –dice– es muy importante. "Al final, esperamos que los muebles del baño sean hidrófugos y que tengan un carácter de sostenibilidad, que te puedan garantizar que las maderas son de bosques sostenibles, que estás ayudando al planeta". En cuanto a los textiles, es partidario de disponerlos en otro ámbito de la casa, y simplemente guardar en el baño la toalla de recambio o un juego.