Daniel Colino, reformista de cocinas: "Si volviera a reformar mi propia cocina, no azulejaría toda la pared"

La cocina ya no es solo el lugar donde se prepara la comida: es refugio, escenario de sobremesas eternas, y, cada vez más, el alma estética de la casa. Por eso, cuando llega el momento de diseñarla o reformarla, cada decisión cuenta.

Daniel Colino de Cocinas CJR, lleva más de dos décadas transformando espacios culinarios y convirtiendo sueños en realidad. Su experiencia le ha enseñado que, a veces, las lecciones más valiosas surgen de los errores del pasado. Con la honestidad que le caracteriza, comparte aquellas decisiones que hoy, con la perspectiva que otorgan los años y proyectos, no repetiría.

Los cinco 'nunca más' de un experto en cocinas

El diseño de una cocina no es solo cuestión de estética. Cada elección influye en la funcionalidad, la limpieza, el orden… y, por supuesto, en la armonía visual. Daniel Colino lo sabe bien: el tiempo y el uso diario de una cocina real (y no de catálogo) te enseñan a distinguir lo esencial de lo prescindible. Porque al final, diseñar una cocina perfecta también implica saber qué evitar, reconocer aquellas tendencias que parecían buenas ideas pero que el tiempo y la experiencia han demostrado lo contrario. Estas son las cinco decisiones que, según el experto, nunca volvería a tomar si rediseñara su cocina hoy.

El grifo cromado: un error que marca la diferencia

"Si voy a volver a hacerme mi cocina, no colocaría un grifo en acabado cromo. Quedan todas las huellas, no combina con los electrodomésticos, ni con los frentes de cocina, ni con nada", explica el experto. La obsesión por mantener impecable ese acabado espejo se convierte en una batalla diaria perdida de antemano. "Teniendo una variedad enorme de colores, estoy seguro de que nunca lo colocaría en cromo".

Alicatados hasta el techo: cuando menos es más

La tentación de revestir toda la pared trasera de la cocina con azulejo es comprensible, pero Daniel Colino lo tiene claro: "Si me comprara una nueva vivienda o reformara por completo mi cocina, estoy seguro de que no azulejaría toda la pared hasta arriba". Su propuesta es mucho más elegante y práctica: "Como mucho, colocaría en la zona de la mesa un azulejo a un metro veinte. Y si fuera de gran formato, mejor". Y sobre esas cenefas decorativas tan populares hace años, su veredicto es rotundo: "Por cierto, de la cenefa de frutas, ni me preguntes".

Campanas de cristal inclinadas: la reflexión del experto

"No sé si fue porque instalamos muchísimas campanas de cristal inclinadas que quizá, si me hiciera hoy la cocina, no volvería a elegir un modelo como este", reflexiona Colino. Su argumento es sólido: "hay una variedad enorme de campanas", y la experiencia le ha enseñado que existen opciones más integradas y estéticamente versátiles.

Cuberteros de plástico: la organización que no convence

"Creo que ni antes, ni ahora, ni en el futuro, colocaría un cubertero de plástico dentro de mi cajón de cubiertos", sentencia. Su crítica es doble: funcionalidad y estética. "No me gusta cómo vienen distribuidos, creo que se desperdicia mucho espacio y viendo nuestros cuberteros de madera y grafeno, no lo colocaría en la vida de plástico".

Fregaderos con escurreplatos: espacio mal aprovechado

El último de sus 'nunca más' revoluciona la concepción tradicional del fregadero: "No colocaría un fregadero con escurreplatos incorporado". Su alternativa es mucho más práctica: "Creo que con la solución del roll up, hoy colocaría un fregadero grande, de 50, 60 o incluso 70 centímetros, pero nunca con escurreplatos".

Estos cinco consejos de Daniel Colino no son solo reflexiones de un profesional experimentado, sino lecciones que nacen de la observación constante de cómo evolucionan nuestras necesidades y gustos. Porque al final, la cocina perfecta no es aquella que sigue las tendencias del momento, sino la que anticipa cómo queremos vivir mañana.