Si quieres que tu casa sea neutra en carbono, apuesta por Neolith

27 de junio de 2020, 22:22

En Arquitectura y Diseño nunca dejamos de insistir que una casa baja en carbono es el fruto de la combinación de hábitos y materiales sostenibles. Economizar en el uso de energía, separar y reciclar convenientemente nuestros residuos, darle a nuestro consumo un sentido circular está bien, pero sería insuficiente si no elegimos también diseños que han sido concebidos desde el inicio con un objetivo ecológico.

La piedra sinterizada Neolith® se ha posicionado como una de las mejores alternativas para conseguir una casa no contaminante gracias a que acaba de obtener la categoría "carbon neutral". Esto significa que en el año 2019 no generó emisiones de CO₂ de puerta a puerta (gate-to-gate) mediante la compensación de huella de carbono.

Para alcanzar este codiciado reconocimiento, Neolith® ha seguido el prestigioso estándar internacional GHG Protocol, y ha puesto en marcha una estrategia de sostenibilidad, dinámica y orientada a la innovación, a la que se suma una compensación de las emisiones de carbono estratégica y de gran valor.

Así, hasta el 48% del peso de la tabla se obtiene de materiales reciclados, y el 90% de los residuos generados en su fabricación asimismo se reciclan. A ello hay que añadir que en 2019 el 100% de la electricidad consumida por la empresa procedió de fuentes renovables, con lo que dejaron de emitirse al medioambiente 7.690 toneladas de CO₂.

Otras medidas implementadas para lograr la neutralidad en carbono han sido la reducción del 40 % del consumo de gasóleo en carretillas elevadoras, la disminución del 20 % de los residuos peligrosos generados y la reducción de plásticos de un solo uso.

Neolith® también ha llevado a cabo diversos proyectos medioambientales que se enmarcan en su estrategia de sostenibilidad. Estos proyectos compensan y absorben una cantidad específica de CO₂. De cara al futuro, uno de los más destacados tendrá lugar en Centroamérica e irá destinado a proteger y mantener la diversidad única de la costa del caribe en Guatemala.

Como resultado directo de las actividades del proyecto, dejarán de emitirse 4 millones de toneladas de CO₂ de aquí a 2021, el equivalente a lo que emiten 440.000 hogares durante un año. Si tenemos en cuenta la duración del proyecto, previsto para 30 años, las toneladas de CO₂ que dejarán de emitirse ascenderán aproximadamente a 22 millones.

Además, traerá importantes beneficios para la biodiversidad, puesto que brindará protección a las más de 400 especies de aves documentadas en el proyecto, así como al hábitat de multitud de mamíferos y reptiles, incluidas 30 especies de alto valor de conservación.