Con motivo de la 56 edición del Salón del Mueble en Milán, Zara Home presentó La Grande Illusione, una instalación efímera en la tienda de la Piazza San Babila, en colaboración con el escenógrafo y director de arte británico Simon Costin. Un conjunto de grabados del siglo XVIII de la época de María Antonieta, en los que los personajes aparecían cubiertos de utensilios que representan su profesión, le llevó a imaginarse a modelos vestidas con la colección Primavera/Verano 2017, una puesta en escena rebosante de originalidad en la que los objetos y textiles de la firma cobran vida creando un onírico mundo paralelo. Con la cristalería se forma un sombrero, una manta cae como un vestido, complementos de mesa y flores cubren a un hada, doradas langostas trepan por el rostro...

La amplia trayectoria de Simon Costin abarca exposiciones colectivas en centros de arte como el Metropolitan de Nueva York, la ICA de Londres o la Galerie Patrica Dorfmann en París. El británico fue la mano derecha del Alexander McQueen y ha colaborado con otros diseñadores de moda como Gareth Pugh o Givenchy, creando los espacios para sus colecciones ready-to-wear y alta costura. Para este proyecto con Zara Home se ha unido con el fotógrafo Tim Walker, quien ha retratado esta intervención con seis imágenes en las que la modelo Irina Liss se sienta frente a su objetivo recreando un majestuoso cuento de hadas. Las producciones del fotógrafo británico siempre son a lo grande.

El currículo de Walker también resulta abrumador: trabajó en Nueva York con Richard Avedon y, con tan solo 25 años, publicó su primer editorial de moda en Vogue. Su particular universo, rebosante asimismo de una onírica escenografía, se puede contemplar en las colecciones permanentes de los museos Victoria & Albert Hall y la National Portrait Gallery de Londres.