La historia de Veja, una marca francesa con nombre brasileño (significa “mira” en portugués), arranca con dos jóvenes galos preocupados por el comercio justo y la ecología. Partidarios de trabajar por un mundo mejor, Sébastien Kopp y François Morillion, abandonaron su prometedora carrera internacional en banca de inversión y en 2002 crearon Just Planet, una fundación centrada en conseguir un mundo más justo que buscaba soluciones para las empresas con las que ofrecer mejores condiciones a los trabajadores y también reducir la contaminación. Dos años después decidieron fundar su propia empresa y aplicar en ella su ideario social. Amantes del calzado, buscaban diseñar la primera sneaker que respetase tanto los derechos humanos como el medio ambiente.

El espíritu retro es característico del modelo Rio Branco de Veja, que este año se presenta con detalles en naranja flúor. 115 euros.

Los jóvenes empresarios localizaron en Brasil a productores de algodón bio y caucho recolectado de manera respetuosa con el medio ambiente para crear el cuerpo de sus zapatillas. Abrieron una fábrica en Porto Alegre y contactaron con Ares, una organización francesa centrada en la reinserción laboral de personas sin techo o con discapacidad, para crear en las afueras de París su planta de distribución. Empezaron a crear zapatillas veganas, hechas de algodón orgánico y suela de goma reciclada, que destacan por su estilo vintage y el tono llamativo del logo.

En la actualidad, Veja está presente en más de 40 países y cuenta con 1.800 tiendas, entre las que se incluyen Selfridges o Barneys. Con más de cien empleados en la compañía, se trabaja para investigar nuevos materiales, alternativas a la piel que no requieran plástico. Sus costes de producción son altos, así que la firma ha apostado por no hacer publicidad. Las redes sociales y el aterrizaje en la web de moda Net-à-Porter en 2017 las catapultaron a la fama. A día de hoy la marca ha vendido tres millones de pares. Entre sus admiradores hay personalidades de todo tipo, Megan Markle, Penélope Cruz, Liam Gallagher o Rosario Nadal engrosan la lista de nombres conocidos que han calzado estas zapatilla blancas, de espíritu eco y diseño elegante.

El modelo V-10 es el más vendido de la marca.  Su popularidad se disparó cuando Meghan Markle calzó este diseño en la final de vela de los juegos Invictus en 2018. Este año se presentan con el logo en flúor. 125 euros.

Su última apuesta para el buen tiempo apuesta por los tonos fluorescentes en los diseños Rio Branco y V10. El logo lateral y en la parte trasera de sus modelos se presenta con un chute de color que destacan en el blanco característico de la firma. Dos modelos para dar pisadas con conciencia.