La Ciudad Condal tiene un nuevo punto de visita obligada para los amantes del arte. En octubre Barcelona dio la bienvenida al Moco Museum en el Palacio Cervelló, una antigua residencia privada de la familia noble Cervelló hasta el siglo XVII. Desde la Edad Media hasta el siglo XX, el palacio perteneció a aristócratas, comerciantes y a la realeza. Con el máximo respeto por el edificio, el arquitecto Studio Pulsen recuperó la esencia original del Palacio Cervelló, adaptándose a las necesidades del Moco Museum para crear un gran espacio moderno y contemporáneo.

La adquisición de este palacio por parte de Moco Museum sigue la estela de su primera propuesta en la Villa Alsberg (1904) en Ámsterdam, un edificio histórico reservado para la élite privilegiada. Se trata de una iniciativa privada de la pareja artística Lionel y Kim Logchies que, durante más de veinte años, estuvieron coleccionando y trabajando codo a codo hasta crear el museo en Países Bajos en 2016. Ambos creen que el arte puede cambiar el mundo. Su intención es mostrar piezas que crean experiencias, activan la imaginación, desafían las normas, amplían perspectivas y cuestionan el mundo a nuestro alrededor. A día de hoy, Moco Museum ha recibido cerca de 2 millones de visitantes de más de 120 nacionalidades diferentes. Para muchos visitantes, es un punto de entrada al mundo del arte, ya que la mayoría de su público es gente joven que se enamora del arte por su propuesta interactiva. 

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Moco Museum en Barcelona Invader RubikJamesBondGirl
Moco Museum

Los dos museos Moco tienen una misma finalidad: adquirir espacios privados que pertenecían a las clases altas y llenarlos de arte moderno y contemporáneo al alcance de todo el mundo. En la imagen se puede apreciar la obra Rubik James Bond Girl de Invader.

Moco Museum en Barcelona Opie Miller LaChapelle
Moco Museum

En la zona dedicada al arte moderno, cada artista es celebrado por tener una visión única. Estos pesos pesados ​​abrazan la voz de las calles y defienden nuestras mentes inquisitivas con imágenes icónicas con las que es fácil identificarse. Se trata de artistas que han dado forma a nuestra conciencia colectiva: sus nombres, arte e ideas están integrados en nuestra vida cotidiana. Andy Warhol, Jean-Michel Basquiat, Salvador Dalí, Damien Hirst, Keith Haring, KAWS, Yayoi Kusama... De todos estos iconos se puede disfrutar en el Moco Museum. 

Moco Museum en Barcelona KAWS Room2
Moco Museum

Tras visitar la zona de artistas míticos se llega a la zona del arte contemporáneo, donde se puede apreciar el arte de la próxima generación de maestros: David LaChapelle, Hayden Kays, Harland Miller, Julian Opie, Nick Thomm, Takashi Murakami... Los artistas contemporáneos que se exhiben en Moco Museum desafían la norma e impulsan a reflexionar sobre nosotros mismos y cuestionar el mundo que nos rodea.

Moco Museum en Barcelona obra de Banksy ForgiveUsOurTrespassing
Moco Museum

Como no podía ser de otra forma en un museo de arte moderno y contemporáneo, el Moco Museum también cuenta con obras de Banksy. Se puede observar una selección muy diversa de obras de toda su carrera, sin autorización si colaboración con el artista, simplemente como un homenaje. Todas las obras expuestas cuentan con un certificado de autenticidad de Pest Control, la única entidad oficial que verifica las obras de Banksy, como la que aparece en la imagen: Forgive Us Our Trespassing.

Moco Museum en Barcelona Guillermo Lorca Room
Moco Museum

En Moco Museum Barcelona también hay exposiciones exclusivas. Comisariada por Simon de Pury, subastador legendario, comerciante de arte y una de las figuras más importantes del mundo del arte, se puede visitar la primera muestra europea individual de Guillermo Lorca, en la que el artista chileno contemporáneo combina la magia y el realismo en Esplendor de la Noche.

Moco Museum en Barcelona StudioIrma DiamondMatrix
Moco Museum

La visita al Moco Museum de Barcelona acaba con dos propuestas interactivas y que se han hecho virales en las redes sociales. La más llamativa es la exposición Diamond Matrix, una sala llena de diamantes que cambian de color y se multiplican de forma interminable gracias al uso de espejos, diseñada por el colectivo holandés Studio Irma.