Desde que el Concéntrico, el Festival Internacional de Arquitectura y Diseño de Logroño, se celebrara por primera vez en 2015, su evolución ha ido cobrando cada ves más relevancia. En su octava edición ha sumado más de 100 participantes y ha cobrado más relevancia, también fuera de nuestras fronteras. Celebrado entre el 1 y el 6 de septiembre, el certamen abrió con Puerta Extraordinaria, una intervención diseñada por el equipo de Associates Architecture como remate de la muralla de la ciudad en El Revellín. La cita congregó a Javier Peña, director del festival, Ángel Carrero, decano del COAR y a 18 equipos de diseñadores y las más de 30 instituciones que hacen posible que la ciudad de Logroño se convierta en el foco de atención durante estos días.

Puerta Extraordinaria, diseñada por Associates Architecture.

Concéntrico ha sido una oportunidad para que los ciudadanos y visitantes descubrieran (y redescubrieran) los espacios de interés del centro histórico de Logroño. Ha sido una invitación para reflexionar sobre el ámbito urbano de la ciudad a través de propuestas de arquitectura y diseño de diferentes formatos. Ha habido intervenciones que han resaltado el valor de lo doméstico, como la Casa con cuatro palmeras, o A la mesa!

A la mesa!, diseñado por Ander López y Sarai Olabarrieta.

Los visitantes han podido ver obras de creadores como Matali Crasset, con una intervención en el Paseo del Espolón. La estructura, inspirada en un búho, dialogaba con la Concha, el kiosco en forma de auditorio que asomaba por detrás de su propuesta. Otro de las grandes figuras internacionales de esta edición ha sido Konstantin Grcic. El alemán ideó, en el Parque Felipe VI, tres círculos que acogían una cancha de baloncesto, unos bidones a modo de tambores y unos columpios de madera. Todas las estructuras estaban formadas por elementos de andamiaje.

Cielo oscuro, de Matali Craset.

Entre los puntos importantes para el certamen está la naturaleza. En esta ocasión algunas de las instalaciones que ahondaban en el tema fueron el Espacio Hiber, diseñado por Rintala Eggertsson en colaboración con el Instituto Finlandia o Medio vacío, Luna llena, ideado por Piovenefabi.

Espacio Hiber, diseñado por Rintala Eggertsson

Tanto estas intervenciones como el resto de los espacios han podido disfrutarse durante los primeros días de septiembre. Sin embargo, la próxima edición del festival volverá a celebrarse en el puente del 1 de mayo, en las fechas habituales de las ediciones anteriores a la pandemia.