Las tendencias, como todo en la vida, tienen un principio y ahora, gracias a nuestros interioristas de cabecera, sabemos que también un final. Por el bien de la humanidad, de los sangrados de ojos y sobre todo en nombre del buen gusto, ha llegado el momento de pasar al destierro algunas de esas modas que ellos nunca elegirían para dar forma a su casa perfecta Que sí, que en algún momento fueron lo más, pero ahora ya no. Sé valiente, sigue leyendo y no llores si al acabar te has dado cuenta de que igual, a lo mejor, toca renovarse. Que le fuerza te acompañe.

 

 

1. Los pósters

Según la interiorista Laura Gärna, de Gärna Studio Gallery, los pósters tienen los días contados. Y también los sucedáneos. Es decir, esa decoración a nivel artístico que no sea original, cuadros que sean fotocopias o impresiones múltiples, todas esas que son como de un cuadro sobre lienzo que la gente pone en masa. ¡Fuera!

2. Papeles cursis

Laura también está un poco harta de los papeles de pared con estampados cursis y ñoños. Tampoco los queremos en nuestras vidas.

Se acabaron los estampados cursis

3. Lo pseudo-oriental

La interiorista de Gärna Studio Gallery va más allá. "Todos los muebles de importación que intentan imitar una estética pseudo-oriental y no son antigüedades originales, esto está ultra pasado de moda", dice. 

4. Nada de fakes

En general todos los muebles clásicos que no son antigüedades verdaderas y no son muebles contemporáneos tampoco, toda esa estética de mueble de imitación francesa o belga o inglesa. Todo lo que es fake, imitación, está pasado de moda, se lleva la autenticidad, piezas originales de época y diseños contemporáneos. Es un consejo de Laura Gärna.

Esa estética como de estilo belga o inglés, es mejor dejar que se vaya

5. Fuera los diseños de imitación

En esa línea, hay que exterminar los muebles de imitación de diseño. Hubo una época en la que se compraban muebles de imitación tipo silla de Vitra o de diseñadores clásicos del siglo XX, porque hubo proliferación de marcas por internet baratas de sillas a 30 euros o parecido. Eso está completamente fuera. O te compras una silla original si puedes, o te compras una silla sin marca ni diseñador pero que no sea un quiero y no puedo.

 

 

6. Acabemos con el mobiliario low cost

"Una de las tendencias a desaparecer y así lo espero –dice el interiorista Fabrían Ñíguez-, porque nunca me ha parecido óptima, es todo el diseño y mobiliario low cost. Las personas cada vez toman más conciencia sobre sus casas, y así como está pasando en la moda con la muerte del fast fashion, que se está cambiando hacia un consumo más responsable, en interiorismo también. Ya no queremos un fastdeco. Cada vez más, espero, que se apueste en los hogares por las piezas especiales y por el diseño de autor y artesanal. Para tener un interior único y con nombre propio".

7. Adiós al minimalismo

El minimalismo como tendencia, de casa fría, o el diseño nórdico, no es que vaya a desaparecer pero sí se está reformulando, pasando a algo más artesanal con materiales más vernaculares. Según Ñíguez, "se viene una vuelta a la riqueza de tejidos y variedad de colores, un eclecticismo en donde las casas respondan cada vez más a quien las habita, y no tanto a la tendencia de ese minimalismo frío sino todo lo contrario. Nos acercamos a lo que a me gusta llamar "Barroco minimalista".

El minimalismo como tendencia se reformula para buscar la calidez en los hogares

 

8. Minimalismo extremo

En consonancia con lo que opina Fabián Ñíguez, Adriana Arranz-Sobrini Ayuso de Galán Sobrini Arquitectos matiza: "Eso no significa que los espacios con los elementos justos y necesarios no tengan su interés, pero los ambientes con pocos muebles, incómodos, extremadamente sobrios y limpios, han dejado de ser tendencia hace tiempo, según nuestro punto de vista. Los espacios para ser vivibles tienen que ser cómodos y acogedores, y por lo tanto los muebles también".

9. El salón de recibir

Otra de las tendencias que va a desaparecer según Adriana es el salón de recibir: "El concepto salón de recibir, quizás porque las viviendas son más pequeñas o porque amortizamos más los espacios, hoy en día no tenemos metros cuadrados empleados en espacios de poco uso, sino que empleamos al máximo cada rincón de la casa, los utilizamos, los disfrutamos y los hacemos lo más vivideros posibles".

10. El color gris

"El color gris ha sido sustituido por colores más cálidos, y más acogedores que han suplantado la tendencia de los grises, como el blanco o la paleta de beiges", añade la interiorista de Galán Sobrini Arquitectos.

El gris nos dice adiós para dar paso a blancos y paleta de beiges

11. Sofás voluminosos

Para el interiorista Miguel Muñoz, "algo que creo que va a dejar de funcionar son los sofás voluminosos muy acolchados, que tienen esos asientos y respaldos con mucho volumen, para pasar a líneas más sencillas, más orgánicas".

12. Estampados tropicales

"A mí me gustan mucho pero creo que ha llegado el momento de decir adiós a los estampados tropicales. Han tenido un rollo brutal pero ya es hora de enterrarlos", dice Muñoz.

Ha llegado el momento de decir adiós a los estampados tropicales

13. Looks tropicales

Igual que opina Miguel Muñoz, según Elena Lapeña y Aitor Viteri de estudio Viteri-Lapeña "la decoración basada en el look tropical, un estilo que trataba de evocar escenas de viajes estivales, ha pasado ya a la historia. Fue algo que saturó los interiores de palmeras, hojas de platanero, piñas, flamencos, etc… tanto en wallpapers, tejidos para tapizados, elementos decorativos, cuadros, figuras de cerámica… está ya totalmente desfasado".

El vintage ha sido un recurso muy utilizado que en ocasiones pretendía camuflar la falta de creatividad

14. Estilo vintage

"El estilo vintage con esos recursos como el azulejo biselado del metro de Madrid (sobre todo en color blanco), que intentaba aportar un ambiente retro a baños y cocinas; o las lámparas de bola de los años 60´s. Ha sido un recurso muy utilizado que en ocasiones pretendía camuflar la falta de creatividad disfrazándolo todo de un "rollito" vintage. Hemos vivido un agotamiento visual de estos dos estilos de decoración, por eso ahora mismo se buscan elementos sencillos pero personalizados y por supuesto de gran calidad en los materiales utilizados, que permitan realzar la fuerza del diseño y la elegancia del propio material", añaden los interioristas del estudio Viteri-Lapeña.

 

 

15. No más azulejos de suelo a techo

Para la interiorista Virginia Sánchez, Virginia Sánchez Interiorismo, "alicatar los frentes de la cocina con azulejos, por muy bonitos que sean, por mucha variedad que haya. No hay foco de infección ni de suciedad mayor que las juntas de los azulejos. Y por supuesto lo mismo para baños. Podemos verlo en la zona de ducha, pero en el resto no. Hay variedad de papeles a los que se les puede dar una especie de barniz protector, o pinturas de fácil limpieza, que además facilitan que el día de mañana si queremos cambiar el baño, no tengamos que hacer obra. Lo dicho. No al alicatado completo".

 

Nada de los alicatados completos, el mundo azulejo hay que mirarlo en la distancia

16. Los muebles a juego

"¿Y esto pega? ¡Pero cómo que si esto pega! Proponer muebles de distinto color, textura o material, es riqueza. ¡No a la uniformidad!! ¡Sí a la heterogeneidad!! A la mezcla, a todo. Es aburrido poner la mesa del comedor del mismo color que el mueble de la tele y del mismo color que las patas de la silla. No. Nein. Niente", dice Virginia. 

17. No sin mi bandó

"Esos cortineros de tela, pegados al techo y tapando el riel de la cortina, no. Hay mil opciones, como molduras o cortineros de obra mucho más elegantes y actuales, más limpios e higiénicos y bonitos y frescos. Y no hay por qué poner un riel, ¡con la cantidad de opciones que hay en barras de cortina vistas que quedan maravillosas!", añade la interiorista de Virginia Sánchez Interiorismo.

No tiene que estar todo perfectamente combinado

 

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