Si se pusieran en fila los 1,28 millones de parachoques que Mazda ha reciclado desde 1992 solo en Japón, se cubriría la distancia entre Londres y Moscú. La elección de ese elemento del coche no es baladí: la marca japonesa fue la primera del mundo que comenzó a reciclar parachoques de vehículos dados de baja.

Es un dato que ilustra por qué Mazda lleva más de tres décadas a la vanguardia del reciclaje de plásticos. De este modo contribuye a dar forma a un futuro sostenible a través del desarrollo de productos y procesos que contribuyan a reducir las emisiones y el uso de materiales con efectos negativos para el medio ambiente.

La consola flotante contiene numerosas funciones útiles, como espacio extra de almacenamiento y una toma de corriente.

Uno de los detalles que más llaman la atención del nuevo Mazda MX-30, el primer vehículo eléctrico del fabricante nipón que llegará a los concesionarios españoles este verano, es precisamente el uso de plástico reciclado. Como explica Jo Stenuit, director europeo de diseño de Maza, “utilizamos procesos muy interesantes de producción de materiales respetuosos desde antes del MX-30, pero este modelo ha sido la plataforma perfecta para poner en primer plano nuestros desarrollos en este terreno”.

 MZD Connect ofrece al conductor pleno control con el sistema de navegación y Bluetooth integrados, además de ser compatible con Android Auto™ y Apple CarPlay®.

La tapicería interior de la sección superior de las puertas del MX-30 es de un material textil fabricado a partir de botellas de PET recicladas. Para crear este material, que tiene un tacto suave y es fácil de procesar, fue preciso desarrollar un nuevo método de moldeo integrado de fibras textiles y plásticas.

El plástico reciclado no es el único aspecto en el que destaca Mazda. La marca también ha desarrollado un bioplástico de alta calidad, muy avanzado dentro del sector. Se vio por primera vez en 2015 en el MX-5 y, desde entonces se ha utilizado ampliamente en el Mazda3 y en el Mazda CX-3. También se usa en las puertas delanteras y traseras del MX-30, y su excelente acabado aporta un extra al diseño.

 El Mazda MX-30 incorpora tejidos fabricados a partir de botellas de PET recicladas.

Tras el desarrollo del primer biotextil del mundo en 2007, la nueva semipiel Premium Vintage, creada por Mazda para el MX-30, se produce empleando agua en lugar de disolventes orgánicos. Este material tiene una textura de cuero clásico impresa sobre una base de piel artificial de alta calidad. A continuación, se le aplica una capa de silicona de un espesor controlado con precisión, que confiere al material profundidad y una agradable calidad táctil.