Cinco claves para conocer a Enzo Mari, el precursor del estilo "Do it yourself" de IKEA

Fallecido a los 88 años, defendió la democratización del diseño y la auto producción de mobiliario. Su obra es un canto a la libertad creativa.

Enzo Mari practicando con el ejemplo: montando su Silla 1, editada por Artek.
Jouko Lehtola

David Quesada

Redactor jefe de Arquitectura y Diseño

21 de octubre de 2020, 09:04

Quizás no sea tan conocido fuera de su país como los grandes maestros italianos del diseño contemporáneo, pero las aportaciones teóricas y prácticas del diseñador y artista Enzo Mari, fallecido el 19 de octubre de 2020 a los 88 años de edad, probablemente sean igual de fundamentales para entender las claves del arte y la creación de espacios y objetos de los últimos cincuenta años. Autor de más de 1.500 proyectos y ganador de cinco Compasso d'Oro, sus textos teóricos han formado a generaciones de diseñadores y han replanteado el oficio de diseñar en términos estéticos, funcionales e, incluso, políticos.

No sabemos si fue por pura coincidencia, o por uno de esos casos extraordinarios de sincronización vital, pero justo al día siguiente moría su mujer, la crítica de arte Lea Vergine, a los 82 años de edad, por complicaciones derivadas de la COVID-19. Este es nuestro pequeño homenaje al legado de Enzo Mari condensado en cinco aspectos fundamentales de su vida y trayectoria.

Jarrón modelo 3087, conocido también como Pago Pago (1969), Danese.

01 Creador multidisciplinar

Formado en literatura y arte en la Academia Brera de Milán entre 1952 y 1956, Mari fue un curioso insaciable que no solo se limitó a la creación plástica, sino que abrazó también el diseño en sus muy diversas facetas, desde mobiliario de oficina hasta juegos didácticos, pasando por toda clase de objetos domésticos. En todas sus manifestaciones, siempre estuvo interesado por el tema de la psicología de la visión y los sistemas de percepción. Describió su filosofía creativa como «diseño racional, elaborado o construido de una manera que corresponde exclusivamente a la finalidad o función».

Sillas Box, Castelli (1976).

02 Las marcas de su vida

Mari desarrolló una fructífera relación con diversas firmas de diseño a lo largo de su trayectoria. La primera fue Danese, para la que creó en la década de 1960 piezas destacadas como el jarrón modelo 3087, conocido también como Pago Pago (1969). Su sensual forma jugó un papel importante a la hora de reivindicar el plástico como un material con el que se podían realizar diseños de calidad y buen gusto. De 1967 a 1977 trabajó para la firma italiana de azulejos Gabbianelli. Los años setenta fueron los de sus principales diseños en el ámbito del mobiliario. En 1971, creó la silla Sof Sof para la firma Driade, con un cojín extraible tapizado y una sencilla estructura de varillas soldadas. Igualmente ingeniosa fue la silla Box para Castelli (1976), un producto de auto-ensamblaje que consiste en un asiento de polipropileno moldeado por inyección y una estructura metálica tubular plegable que se puede desmontar para guardar en una caja.

Silla Sof Sof, Driade (1971).

03 IKEA "avant la lettre"

El concepto del hazlo tú mismo que encarna la silla Box y otros proyectos es central en la obra de Enzo Mari y coherente con su filosofía del diseño democrático. Para Mari crear una silla o cualquier otro objeto doméstico no era un acto puramente estético: era también el fruto de una intencionalidad política. Declarado comunista, fue un firme partidario de que la belleza fuese accesible a todo el mundo y por tanto reproducible en masa sin comprometer su utilidad. Sus ideas al respecto quedaron fijadas en el libro Proposta per un'autoprogettazione (1974), un proyecto para la realización de muebles con ensamblajes sencillos de tablas y clavos que tuvo una gran influencia y que posteriormente sería la clave del éxito masivo de IKEA. Sus páginas, un canto a la libertad creativa de las personas, contenían entre otras propuestas la Silla 1, el primer diseño que abandonaría el papel para en entrar en producción en 2010 de la mano de la firma finlandesa Artek.

Mesa Metamobile (1974), un diseño derivado de los postulados del libro "Autoprogettazione".

04 Conexión Barcelona

Crítico con la deriva que tomó el diseño tras la época dorada de los años sesenta y setenta, Enzo Mari publicó en 1999 el Manifiesto Barcelona con motivo de la Primavera del Disseny de ese año. En él reivindicaba un diseño basado en la ética y la utopía. Para el creador italiano, el papel del diseñador debe ser el de intermediario entre el usuario y el producto. No se trata de trabajar para el usuario, sino de hacerlo junto a él, conseguir que deje de ser un consumidor pasivo y hacerle partícipe en el proceso de creación, permitiéndole que no solo adquiera diseño sino que también lo sienta como propio y desarrolle un vínculo emocional con el resultado.

El calendario perpetuo Timor (1966) forma parte de la colección permanente del MoMA de Nueva York.

05 Homenaje póstumo

Enzo Mari no ha tenido oportunidad de disfrutar del gran homenaje que le dispensa la Trienal de Milán con una exposición comisariada por Hans Ulrich Obrist con Francesca Giacomelli que se inauguró el 17 de octubre, apenas dos días antes de que falleciera, y que durará hasta el 18 de abril de 2021. En la muestra se documentan los más de 60 años de carrera del diseñador con una sección histórica y las contribuciones de artistas y creadores internacionales.

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