Si hubiera continuado con la tradición familiar, Álvaro Catalán de Ocón (Madrid, 1975) habría sido banquero. Pero el gusanillo de la creatividad le llevó a estudiar diseño industrial en Milán y la Central Saint Martins de Londres, donde se graduó. Su trayectoria en este campo, libre y coherente, le ha llevado a ser reconocido con el Premio Nacional de Diseño 2023, "por la trascendencia internacional de su concepción del diseño como narrativa inequívoca del mejor y más inclusivo diseño español en el siglo XXI", según ha manifestado la ministra de Ciencias e Innovación en funciones, Diana Morant.
El galardón supone todo un reconocimiento a este creador, cuyo proyecto más conocido y celebrado ha sido la ya icónica lámpara PET, una creación que ya ha cumplido 10 años, y destaca por estar tejida por artesanos de distintas partes del mundo a partir de desechos de botellas de plástico. Con este proyecto ha colaborado con poblaciones indígenas a las que ha ayudado a recuperar parte de su tradición en torno a la artesanía.
Con presencia en cinco de los museos más relevantes del mundo, Catalán de Ocón ha conseguido, desde su estudio en Carabanchel (Madrid), lanzar "un potente mensaje al mundo del diseño y poner el acento en la importancia de la colaboración, la protección mutua, la sostenibilidad y el hermanamiento entre culturas". Comprometido con la sostenibilidad en su trabajo, para Ocón, los materiales más ecorresponsable son los biodegradables. "Por eso, nosotros también hemos optado por la reutilización en vez de por el reciclaje. Preferimos coger un objeto y transformarlo. Yo creo que es ahí donde uno debiera poner la mirada. Para reciclar un plástico, tienes que recogerlo, transportarlo, llevarlo a una fábrica, derretirlo, transformarlo en otro… para luego decir que ese objeto está hecho con un material reciclable. No salen las cuentas. Lo primero que hay que hacer es dejar de producir objetos de un único uso en materiales no biodegradables", tal y como nos contó en una ocasión.
Junto a Catalán de Ocón, el Ministerio ha anunciado las personas y entidades galardonadas con el reconocimiento más importante en España en innovación y diseño, con los que se distinguen las trayectorias profesionales destacadas en estos ámbitos. Así, en la modalidad de Joven Talento Innovador, dirigida a personas con menos de 36 años, el premiado ha sido Jordi Iranzo, fundador de Clap Studio, mientras la firma de mobiliario vasca Ondarreta ha obtenido el Premio Nacional de Diseño 2023 modalidad Diseño y Empresa.
Nacida hace más de 40 años en una ebanistería tradicional, la firma vasca Ondarreta se ha especializado en editar muebles de primerísima calidad en armonía con el entorno. El movimiento orgánico de la naturaleza recuerda a la forma en que esta empresa familiar se ha ido transformando a lo largo de los años. En esta firma lo tienen claro. Su misión es que cada nueva colección sea una expresión de su profundo respeto por una herencia artesana de más de cuarenta años y el deseo de evolucionar para mantener un estilo vibrante. "Ondarreta ha recibido este premio como exponente de la excelencia del diseño de mobiliario en España, con la investigación, la innovación, la sostenibilidad medioambiental y social y el diálogo con el entorno cercano como señas de identidad", señala el fallo del premio.
Por su parte, Jordi Iranzo, ha logrado el reconocimiento en la modalidad Jóvenes Profesionales del Diseño "como ejemplo del prometedor futuro del diseño nacional" y por su capacidad para impactar en el ámbito internacional con su nueva forma de entender el espacio.
Con proyectos en China, Alemania y España y junto a su socia en Clap Studio desde 2017, Àngela Montagud, Iranzo "ha logrado crear conceptos únicos que apelan a las emociones con una mirada internacional, interdisciplinar e innovadora que le ha permitido trabajar con empresas de todo el mundo en sus seis años de historia".