Cuando la música es tu pasión buscas que todo sea un homenaje: comprar el mejor equipo, no escatimar en nuevas tecnologías y apostar siempre por el diseño. Es entonces cuando construimos pequeños altares en casa que son un eterno tributo. Para esos melómanos el estudio californiano Bossa ha creado los Moonraker.

Estos preciosos altavoces son un homenaje al diseño de mediados de siglo. Cada detalle es funcional, hermoso y ejecutado con reverencia por la tradición modernista. La carcasa de polímero curvo de Moonraker ha sido cuidadosamente diseñada para minimizar las resonancias y la difracción.

Moonraker de Bossa.

El resultado es un altavoz con excepcionales cualidades de imagen y una sorprendente falta de aspereza. El sonido es exuberante y detallado, acercándolo a la música y compitiendo dignamente contra los convencionales cajones de madera de alta densidad.

Un buen diseño significa controles simples e intuitivos y en esto el Moonraker sabe como satisfacer al consumidor. Nada de perderse en complicadas opciones pensadas para un publico especializado, solo funcionalidad que haga mejorar la experiencia. Te brinda el control que necesitas sin las funciones superfluas que no tienes.

Moonraker de Bossa.

La pareja de altavoces es imprescindible para conseguir un sonido envolvente e inmersivo, aunque es cierto que ya se han desarrollado nuevas tecnologías con sonido unidireccional, sin embargo la música pierde fuerza en los bajos y muchas veces es una transmisión pobre que distorsiona el producto. Moonraker incluye dos altavoces biamplificados separados para brindarle la mejor experiencia auditiva posible tal y como recomiendan los expertos.

Moonraker de Bossa.

Su funcionamiento es mitad analógico y digital. Gracias al Bluetooth a la tecnología apt-X y AAC proporciona una conexión inalámbrica de alto rendimiento para la mayoría de los dispositivos portátiles (móvil, portátiles, reproductor de música). Y Las entradas digitales coaxiales y ópticas cableadas funcionan con televisores y otros dispositivos de audio digital con cable para aprovechar al máximo el equipo.

Moonraker de Bossa.

Como todo buen diseño, contiene un ingrediente esencial: el trabajo artesano. Bossa es un estudio especializado en el sonido y el trabajo artesanal de sus productos. Se utilizan materiales honestos y de alta calidad en todos los aspectos del proceso de fabricación y son fácilmente personalizables sus patas entre la siguiente gama: la madera de las patas entre nogal negro, teca recuperada y fresno blanco. Para obtener los altavoces futuristas que siempre quisiste tener solo hay que ahora 2.400 dólares, aunque hay quien podría decir que la buena música no tiene precio.