Cuando en 2007 el edificio madrileño de CaixaForum cubrió su fachada con un jardín vertical ideado por el botánico francés Patric Blanc se despertaron conciencias y, con este ejemplo de 480 metros cuadrados de frondosa superficie, se abrió un mundo de posibilidades. Desde entonces en España empezaron a proliferar las fachadas cubiertas de verde con trabajos que combinan arquitectura y botánica y contribuyen a introducir más espacios naturales en la urbe.

 

 

Con la idea de crear ecosistemas autosuficientes que actúan como un pulmón verde dentro del entorno urbano, el ingeniero técnico forestal Hugo Riquelme y el arquitecto Jordi Serramía fundaron Singular Green, una empresa alicantina que persigue la eficiencia energética aplicada a la climatización de los hogares y otros edificios, al tiempo que se actúa de forma respetuosa con el medioambiente.

Trabajan todo lo que sea verde, pero, lo que está acaparando en mayor medida su actividad es la instalación de cubiertas vegetales en los tejados de casas unifamiliares y edificios.

Toldos vegetales

Aprovechando su experiencia utilizando elementos verdes para aislar y proteger edificios, ofrecen también soluciones para las ciudades, los denominados Green Shades, que como definen, "es el primer sistema del mundo que permite instalar toldos vegetales o velas tensadas cubiertas de vegetación". 

 

Vista aérea de toldos vegetales

En las ciudades, donde el calor es un problema, estos elementos abren un nuevo abanico de posibilidades para el paisajismo urbano y la climatización de espacios gracias a las estructuras vegetales que se pueden instalar en calles comerciales, terrazas y plazas. Estos proyectos reducen la temperatura tanto en su entorno como bajo la cubierta. "Gracias a la evapotranspiración producida por el sistema vegetal, las velas actúan como aires acondicionados vegetales", tal como indican los creadores.

 

La intalación

La ligereza y facilidad de instalación de este sistema facilita que pueda colocarse en en calles donde, por falta de espacio o dificultad de intervención, no se pueden plantar árboles u otro tipo de vegetación.

 

 

Los beneficios de los toldos vegetales

 

  • Creación de espacios urbanos con sombra. Este sistema genera sombras para el disfrute del espacio público sin quitar espacio a los usuarios. Es ideal para aquellos lugares con alta exposición solar, que además, quedan protegidos a su vez de la lluvia.
  • Mayor aprovechamiento de los espacios urbanos. Permite introducir la vegetación en áreas urbanas donde el espacio es reducido. De esta manera se consigue la revitalización de espacios urbanos deteriorados o de difícil aprovechamiento.
  • Reducción de la contaminación del ambiente. Tal como explican desde esta empresa alicantina, un metro cuadrado de superficie vegetada genera el oxígeno requerido por una persona en todo el año y consigue filtrar gases nocivos, mejorando la calidad del aire de los entornos en los que se instala. También absorbe NOX y CO2, lo que contribuye a la mejora de la calidad del aire en la vegetación. Además, reduce la contaminación acústica mediante la absorción de las ondas por parte del sustrato y la reflexión de la vegetación.
  • Regulan la temperatura y la humedad. A través del proceso de evapotranspiración de las plantas se genera una disminución de la temperatura del entorno que contribuye a la regulación de la humedad. Los espacios y proyectos creados reducen la temperatura tanto en su entorno como bajo la cubierta y actúan como aires acondicionados vegetales con una potencia de enfriamiento 112 frigorías/m2.

 

Viga central de celosía de aluminio