Este mes de diciembre ha llegado con la bajada de temperaturas propias de la estación invernal que empezará dentro de unos días. Cuando el termómetro desciende tendemos a refugiarnos más en casa. Por eso queremos convertir nuestros interiores en espacios cálidos que nos acojan sin importar si fuera llueve, nieva o haga viento. Y eso es especialmente importante en el dormitorio, la habitación destinada al descanso, que debe ser reconfortante. 

Te presentamos esta lista de ideas con las que crear los dormitorios más abrigados, cálidos y estilosos.

1 /9
En el dormitorio principal
Manolo Yllera

Abriga tus paredes

Cuadros, marcos, papeles e incluso tapices y alfombras…Siempre que se escoja con buen criterio, hay numerosos elementos capaces de vestir las paredes y dar calor visual. Cierto es que una pared vacía puede transmitir serenidad, pero cuando se busca calidez, los objetos ayudan.

Pia Capdevila madera dormitorio cama cojines mostaza
Paloma Pachueco

Escoge materiales naturales

Nada como la madera para conseguir una atmósfera cálida. Es perfecta para vestir suelos mediante parqués, e incluso techos a través de paneles murales como este dormitorio proyectado por Pia Capdevila. Si revestir la casa no está entre tus planes, puedes incorporar este material en piezas de mobiliario.

Además de la madera, las fibras vegetales de origen natural, como el mimbre, el ratán o el bambú, son idóneos para crear un aspecto artesanal que ayuda a dar a las estancias el deseado carácter cálido, especialmente durante los meses fríos.

 

dormitorio manta plaid cojines
EUGENI PONS

Recurre a colores cálidos

Numerosos estudios han corroborado que el color tiene la capacidad de influir no sólo en el estado de ánimo, sino en como percibimos los espacios. Por eso, para crear un ambiente cálido, nada como recurrir al predominio de colores tierra y el uso de marrones, beiges, topos, mostazas, naranjas y verdes oscuros. Además, estos tonos permiten su combinación entre ellos, lo que supone un punto a favor llegado el momento de elegir desde el color de las paredes, a un tapizado o un pequeño detalle decorativo.

Dormitorio con cerramientos transparentes al exterior y cortinas en gris para aislar del exterior
Derek Swalwell

Cortinas que protejan

Además de alejarnos de miradas indiscretas, las cortinas también son un elemento con el que dar más calidez a una estancia de forma sencilla. Como el frío tiende a colarse por los cristales de las ventanas, revestirlas con tejidos hará disminuir la sensación fría que las acompaña, tanto visual como térmicamente hablando. Por eso, durante el invierno es mejor sustituir las cortinas de lino por otras de tejidos más gruesos que regulen la entrada de luz y aíslen de las bajas temperaturas del exterior.

Combinación de colores cálidos.
The Coorl Republic

Escoge colores cálidos

Numerosos estudios han corroborado que el color tiene la capacidad de influir no sólo en el estado de ánimo, sino en como percibimos los espacios. Por eso, para crear un ambiente cálido en el dormitorio, nada como recurrir al predominio de colores tierra y el uso de marrones, beiges, topos, mostazas, naranjas y verdes oscuros. Además, estos tonos permiten su combinación entre ellos, lo que supone un punto a favor llegado el momento de elegir desde el color de las paredes, a un tapizado o un pequeño detalle decorativo.

Dormitorio con cabecero blanco y con mantas.
Kave Home

Rodéate de mantas

Uno de los complementos más fáciles de adquirir y que no fallan cuando se busca dar calidez  son las mantas. Es uno de los primeros textiles que incorporamos cuando bajan las temperaturas, tanto en el salón como en el dormitorio, donde además de servir para abrigarnos, pueden aportar una nota decorativa si se ponen a pie de cama. Tanto con el clásico estampado de cuadros, como en colores oscuros, son perfectas para generar confort visual.

A la hora de decantarse por un tejido, las realizadas con fibras naturales, como el mohair o la lana virgen, son eficaces contra las bajas temperaturas al mismo tiempo que agradables al tacto.

Casa moderna cálida con dormitorio con manta y cojines
Pere Peris

Cojines en cualquier rincón

Mullidos y adaptables a cualquier estilo decorativo, son complementos indispensables de muebles que nos acogen, como sofás, divanes y butacas y, por supuesto, las camas. Su uso consigue aumentar la sensación de calidez (especialmente si se forran con tejidos gruesos), al mismo tiempo que disminuye la humedad en el ambiente y potencia el estilo de nuestra decoración.

Salón con paredes de madera y lampara de pie.
Muuto

Juega con la iluminación

No hay interiorista o arquitecto que no de importancia a la iluminación, clave en cualquier proyecto. Usarla de forma correcta ayuda a construir esa atmósfera cálida y acogedora que deseamos. Para conseguirlo, el truco está en escoger bombillas de temperatura siempre cálida y reducir la presencia de luces frías. Los modelos de sobremesa o pie son perfectos cuando se busca crear ambiente, ya que difunden una luz más tenue e íntima, y las luminarias con pantallas en colores rojizos, anaranjados y tierra dan a la luz un tono todavía más cálido.

Dormitorio con cabecero tapizado-
Orchad Piper

Tapiza el cabecero

Apunta esta máxima: cuanto más mullido, más abrigado resultará el dormitorio. Por eso, si además de las mantas, los cojines y las alfombras, forramos el cabecero con un  textil suave, se logrará un extra de confort visual, térmico y acústico.

 

Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en www.arquitecturaydiseno.es, suscríbete a nuestra newsletter.