Bosa y su Mickey Mouse de porcelana

Poco se hubiera imaginado Walt Disney allá a finales de 1908 que su icónico ratón al que le dio vida a través de su voz, personalidad y carácter hubiera sido objeto de un sinfín de homenajes por su 90 aniversario, Levi's, Desigual, Swatch... las mejores firmas de consumo quisieron celebrar el expléndido aniversario cuyos festejos se han alargado hasta el Salón del Mueble de Milán, en el que la marca veneciana Bosa ha tomado al entrañable ratón como referente para su nuevas creaciones.

Mickey Mouse toma nueva vida a través de la creatividad de la diseñadora milanesa Elena Salmistraro y la excelencia de fabricación de Bosa. Se trata de un proyecto del que emana una energía atemporal que convierte a Mickey en la estrella de la colaboración. Con una altura de 50 centímetros, la pieza está realizada con maestría y singularidad en una acertada combinación de esmaltes de colores y metales preciosos.

Bajo una expresión alegre, Elena Salmistraro proyecta a un Mickey Mouse contemporáneo, olvidando sus míticos calzones rojos para vestirlo con una chaqueta motera, pantalones cortos con impresionantes decoraciones de arte callejero, todo ello rematado con zapatos de tachuelas. El resultado es un juego de colores contrastados y refinados efectos brillantes y mates. Se nota que la diseñadora se ha empapado de la cultura millennial que adora la decoración relacionada con el consumo masivo y las series de TV.

Las texturas tridimensionales creadas por Salmistraro de la mano de Bosa, envuelven al personaje convirtiéndolo en un héroe que rompe con los estándares. La cerámica, ese material que solía decorar las casas de nuestras madres en forma de pequeñas figuritas de pastorcillas o de escenas románticas se transforma en uno de los icono pop por excelencia. Eso sí, se trata de un juego con un marcado lenguaje emocional que, en el caso de Mickey, supone un viaje al pasado recuperando recuerdos de la infancia.