Cerca de Cala Tarida, en Ibiza, en una urbanización especialmente respetuosa con el entorno, Jaime Romano –abajo– y Kimberley Díaz proyectaron un espacio diáfano y horizontal que apenas "rompe" el paisaje en el que se asienta. Can Teix (así se llama) es el refugio de vacaciones de una familia cosmopolita que pasa la mayor parte del año fuera de Europa. Diseñada y levantada desde cero en 2019, está construida con "piedra marés en los muros exteriores y elementos exentos inspirados en la cantería fenicia, paños acristalados y una ligera estructura metálica", nos cuentan desde el estudio.

Romano Arquitectos exprimió las posibilidades de la conexión dentro-fuera hasta sus últimas consecuencias, abriendo sin solución de continuidad el gran espacio central (que engloba salón, comedor y cocina) y la habitación matrimonial a la terraza y la piscina, que parecen una prolongación del interior. Los 340 metros cuadrados de la estructura (más 1.800 de parcela) se completan con otros tres dormitorios y sus respectivos baños, y las diferentes zonas comunes se dividen no con paredes o tabiques, sino a través de texturas como el mármol crema de la cocina, la madera de las vigas, los muebles de autor (de Gio Ponti a Pierre Jeanneret, entre otros, una selección obra de la interiorista Begoña Sebastián) o el suelo de piedra caliza pulida que da continuidad a la vivienda.

 

Vista del espacio exterior

"La clave del proyecto está en el patio que funciona como distribuidor y permite que la construcción se proyecte hacia fuera y que la ubicación de la única planta funcione mejor. Resuelve al mismo tiempo el acceso, la iluminación, la ventilación con respecto a la parte más calurosa de la casa (que da al mar) y la de la más fresca y ajardinada, con vistas al campo", detalla Jaime. Los muros hechos con morterode cal tradicional, como se levantaban en la isla hace cientos de años, respetan el espíritu arquitectónico de Ibiza y suavizan el diseño más contemporáneo.

Los pinos y la vegetación local dispuesta por la paisajista Andrea Sánchez rematan el proyecto exterior, parcheado por grandes bloques rectangulares de piedra en el suelo que funcionan como una pasarela de acceso. "La montaña recoge los olores de la vegetación y el aire fresco, formando un gradiente entre la fachada sur y la norte", concluye Romano. Es el quinto elemento de Can Teix.

 

Desde este espacio se ven los muros realizados con mortero de cal tradicional
1 /11
En la entrada principal
Manolo Yllera

En la entrada principal

La puerta de madera tachonada se inspira en los palacios de Dalt Vila, el casco viejo de Ibiza, y los muros son una versión contemporánea de la cantería fenicia. 

En el salón
Manolo Yllera

En el salón

Butacas de Easy, de Pierre Jeanneret, en Galería También; mesas de mármol Epic, de GamFratesi para Gubi, y de madera de anticuario; sillas Superleggera, de Gio Ponti para Cassina, en Box 3 Interiors; jarrones y lámpara de pie, en Mon Château  en Espagne, con flores de The Floral Studio Ibiza; tinaja, en Vicente Ganesha; cojines, de Ábbatte, y óleos, de Antonio Villanueva

En primer plano
Manolo Yllera

En primer plano

Mesita con base de mármol Jey, de Francesco Rota para Lapalma. Sobre la encimera de mármol crema de la cocina, jarra de Mon Château en Espagne. Taburetes Form Barstool, de Normann Copenhagen. Sobre el aparador de Westwing, óleo del artista Antonio Villanueva

Toda la vivienda tiene un hilo conductor
Manolo Yllera

Toda la vivienda tiene un hilo conductor

El suelo de piedra caliza pulida, que prolonga el salón y el dormitorio a la terraza y el paisaje ibicenco. Al desaparecer, los amplios paños de cristal correderos refuerzan esa sensación de continuidad entre el interior y el exterior. 

En la zona de comedor
Manolo Yllera

En la zona de comedor

Mesa Juice, de Miniforms;  sillas Gent, de GamFratesi  para Gubi; jarrones y óleo de la pared, en Galería También, y arreglo vegetal, de The Floral Studio

En el dormitorio principal
Manolo Yllera

En el dormitorio principal

Cabecero a medida, óleos, de Antonio Villanueva; jarrones, en Vicente Ganesha; cojines, de Ábbatte, y en la pared, tapiz de lana de la francesa Aline de Laforcade. Butaca Fly, de &Tradition, y lámpara Arum, de Ferm Living

La puerta principal
Manolo Yllera

La puerta principal

Da paso a un patio amurallado que actúa como atrio de bienvenida y alrededor del cual se articula la vivienda. 

El paisajismo de Andrea Sánchez
Manolo Yllera

El paisajismo de Andrea Sánchez

Combina matorrales y árboles típicos de la isla con grandes planchas de piedra a modo de pasarelas

Patio
Manolo Yllera

Patio

"La clave del proyecto es el patio amurallado que funciona como distribuidor"

Terraza
Manolo Yllera

Terraza

Con mobiliario de la colección Natal Alu, de Tribù

En el baño
Manolo Yllera

En el baño

Con acceso directo al patio, encimera de Corian blanco; mueble de madera de roble hecho a medida; bañera Luv, de Cecilie Manz para Duravit, y grifería, de Dornbracht