Nos vamos a la la feria de arte contemporáneo Swab 2019 con el artista Longinos Nagila

"El papel es un material muy interesante. Cuando empiezas un dibujo, el primer sitio en el que poner en orden tus ideas es un trozo de papel: ahí es donde empiezas haciendo tus esbozos. Entiendo el papel como una superfície de dos dimensiones que tiene el potencial de las tres dimensiones cuando se da la intersección entre el artista y el material. Mi trabajo adquire una forma 3D en una superfície 2D. Creo que el lienzo, a diferencia del papel, no ofrece tanto margen para la manipulación y la exploración.”

“No considero que una pieza esté finalizada hasta el momento en que se ilumina. Existe una gran diferencia entre contemplar una obra en una luz neutral, unidireccional, y hacerlo en un entorno de luz muldireccional, especialmente desde diferentes ángulos. Además, el entorno lumínico le da una nueva fuerza a la obra. Si, por ejemplo, usas una luz coloreada, todo cambia completamente, alterando por completo la percepción del original. Es algo que exige mucha atención y se convierte en parte esencial de la experiencia de ver la obra.”

“A menudo comparto una parte de mi trabajo en redes sociales como Instagram. Casi nunca una pieza entera, más bien pequeñas muestras del proceso. No creo que las redes sociales sean la mejor manera para experimentar una obra de arte. Para disfrutar de una experiencia completa uno debe ver la obra en su forma física. Incluso ante la pieza, a veces puede parecer que las formas han sido cortadas por una máquina. Si las observas de lejos, uno puede creer que són dibujos, hasta que te aproximas.”

“Utilizo papel de colores luminosos por la manera en cómo reaccionan a la luz. Las espinas crean algo así como una sombra que impide que la luz llegue directamente al paper de color. Pero cuando la luz llega a esa pequeña superfície de color, rebota de forma fragmentada: una parte está un poco oscurecida por la sombra y la otra queda completamente expuesta, lo que crea una cierta gradación. La sombra creada por las espinas no es negra. Lo que vemos como resultado es un reflejo coloreado que adopta el color de los diferentes papeles."

“Los cortes que realizo en el papel són pequeños triángulos a los que llamo espinas. Me hacen pensar en las espinas de una rosa, en como crecen en el tallo de la planta, sin ningún tipo de control u organización. Es un elemento con el que resulta fácil trabajar. Se trata de tomar una espina y multiplicarla en la superfície del papel, creando contornos que revelan una figura humana o una forma geométrica. De alguna manera, la espina es la unidad básica. Parto de ahí y trato de controlarlo, replicarlo y crear algo a partir de eso.”
 

"Pienso que mi trabajo funciona como un mecanismo robótico, en el que te mueves con calculada precisión. Si te equivocas, el resultado es muy visible. La precisión se establece en el momento de decidir la dirección y posición de las líneas. Y cuando empiezas a cortar las espinas, todo queda programado en la mente y la mano ejecuta la distancia de una espina a la siguiente de forma automática. Cuando llega el momento de abrir las espinas para revelar lo que llamo el espacio vacío, ese momento tiene un componente muy performativo."