Te contamos cómo presumir de jardín este verano

Salir al espacio exterior es uno de los mayores placeres del día. Cuida todos los detalles de tu jardín y conviértelo en tu paraíso particular.

Cristina Ros

Redactora de Arquitectura y Diseño

20 de agosto de 2019, 17:05

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Más y mejor

El espacio exterior (la terraza, el jardín) es un lugar para ser vivido, así que debe ser tratado con el mismo cariño que cualquier otra habitación de la casa. Si tienes un jardín bien diseñado, pasarás más tiempo en él, y cuanto más tiempo pases al aire libre, más feliz serás. En la foto, JM Architecture by Jacopo Mascheroni.

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El buen sendero

El camino que se hace hasta la puerta de entrada cuenta, ¡y mucho! La experiencia que tienen tus invitados al caminar hacia la entrada es una primera aproximación a la casa que les puede hacer sentir cómodos o, por el contrario, les puede crear una sensación un poco desagradable que condicione su posterior reacción. Casa Cavanellas, de Roberto Burle Max.

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Materiales resistentes

A la hora de construir un espacio exterior, piensa en términos de permanencia. Si eres previsor e inviertes en materiales resistentes, le estás dando a tu jardín un buen esqueleto. Piedra, hormigón, madera... llevan bien el paso del tiempo. Jardín de Studio Niels Maier.

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Plan quinquenal

Si estás en la fase inicial del proyecto, planta únicamente en previsión del jardín que quieres tener en cinco años. Planta semillas, selecciona esquejes, compra tiestos pequeños. Si tienes un poco de paciencia, ahorrarás mucho dinero.

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Cultivar la amistad

Si quieres tener una relación de cordialidad con tus vecinos de jardín, te recomendamos que apuestes mejor por un seto que por una valla. Ambos cumplen la misma función, separar dos parcelas, pero el primero resulta mucho más amable y natural que el segundo. Villa Deca, de Studio Guilherme Torres.

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Material de trabajo

Para cuidar y mantener el jardín en perfectas condiciones, compra herramientas sólidas y resistentes hechas en acero de calidad y que sean bonitas. De esta manera, las disfrutarás toda la vida. En tu set no puede faltar una azada japonesa (con opción para diestros y zurdos). Palácio Gustavo Capanema (Río de Janeiro).

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Plantar y comer

Integra el cuidado del jardín en tu rutina diaria plantando algún fruto que puedas comer en el almuerzo –no necesariamente el mismo día–. Vale todo: de lechugas a tomates pasando por perejil. Convertirás el huerto en una extensión de tu despensa. Jardín de Anouska Hempel Design.

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Pinceladas

Aplica el color en la terraza o en el jardín de una forma inteligente. Si tienes una puerta de hierro, añádele elegancia pintándola de azul o de verde oscuros. O bien crea un foco de atención y agrupa las plantas del mismo tono. El color establece el estado de ánimo del jardín. Atelier d'Architecture Bruno Erpicum & Partners.

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Il cielo in una stanza

A veces tenemos la suerte de vivir en una casa en la que la Naturaleza se cuela por la ventana iluminando el salón o el comedor. Dicen los sabios que una de las condiciones indispensables para vivir en armonía con el universo es que las vistas del dormitorio incluyan algo que florezca cada primavera.

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Orden y caos

Frente a la perfección, escoge personalidad. Un poco de locura en el jardín es buena y saludable. Si en el interior de casa pones en los jarrones con flores unas hojas de eucalipto para darle un tono más salvaje, lleva la misma técnica a la terraza o el jardín y simultanea el orden con el caos. Al final, son caras de la misma moneda. Retrato de Burle Max.