Venecia se ahoga por culpa del cambio climático
La Bienal de Arte suspendida, museos cerrados... La ciudad de los canales sufre uno de los peores episodios de "acqua alta", la subida del nivel del mar que inunda sus calles y plazas.
Quien ponga en duda el cambio climático tendría que darse una vuelta estos días por Venecia para salir de su incredulidad. Habría que remontarse hasta 1966 para encontrar un fenómeno de acqua alta –la subida del nivel del mar que provoca inundaciones– tan grave como la que está padeciendo estos días la ciudad de los canales. Las mareas de otoño son un fenómeno tradicional, pero los efectos del cambio climático están aumentando su frecuencia e intensidad. A ello hay que unir el fuerte temporal que azota la costa véneta y la negligencia en la construcción de un sistema de diques, un problema que se arrastra desde hace más de cuatro décadas.
Los venecianos ya están curados de espanto y son precavidos a la hora de salvaguardar bienes y proteger los edificios esta época del año, pero dada la gravedad del episodio actual no se han podido evitar imágenes apocalípticas como lanchas y vaporettos sobre las aceras o una icónica plaza San Marcos anegada bajo más de un metro de agua. Esta incluso ha llegado a penetrar en el interior de la basílica de San Pedro. El famoso templo bizantino se encuentra en la parte más baja de la isla principal y no ha podido evitar que se inundara por sexta vez en sus más de 1.200 años de historia.
La actividad cultural se ha visto también afectada, con el cierre de la Bienal de Arte que este mes apuraba sus últimos días y de otros museos como la fundación Peggy Guggenheim, el museo de la Punta de la Dogana diseñado por Tadao Ando o el Museo Fortuny. Cualquier instalación artística que se hallase cerca del nivel de los canales ha padecido los estragos del acqua alta, incluyendo un grafiti atribuido al enigmático artista británico Banksy, que ha quedado medio oculto.
Según Gabriel Jordá, científico del Instituto Español de Oceanografía (COB-IEO), el episodio actual de acqua alta no ha sido de los más fuertes. Sin embargo, la subida del nivel del mar ha multiplicado sus consecuencias. En el caso del Mediterráneo, desde comienzos del siglo XX el nivel ha crecido entre 20 y 25 centímetros. Si queremos preservar el inconmensurable patrimonio artístico y el atractivo cultural de Venecia, no queda otra que dejar de hacer caso omiso a las evidencias científicas del cambio climático.