El primer taxi acuático eléctrico también vuela

La emergencia climática nos obliga a encontrar alternativas a los combustibles fósiles y la electrificación del transporte es una de ellas. Las marcas de coches, motos y camiones ya están haciendo la transición hacia la movilidad más sostenible, pero no es la única. También el mundo de la navegación, aunque de manera más paulatina, se está dejando invadir puesto que según las recomendaciones del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático, para 2050 ya deberíamos haber reducido a la mitad las emisiones de gases de efecto invernadero, y este ambicioso objetivo no podrá materializarse sin una profunda transformación del transporte.

El sector marino presenta muchas dificultades técnicas para su electrificación. Requiere de mucha energía que debe almacenarse en baterías de litio, que en un peso equivalente, solo transportan un 2% del contenido de energía que la gasolina. Por lo tanto, los barcos eléctricos tienen muy limitada su autonomía si recurren a un diseño tradicional. Pensando en el desarrollo de un transporte de personas sostenible por mar, la start up suecaCandela Speed Boat AB acaba de presentar un taxi eléctrico acuático capaz de sobrevolar por encima de las olas gracias a las alas retráctiles que rodean la quilla.

Para reducir el rozamiento del agua, en el diseño de Candela se ha recurrido a las hidroalas que sacan el casco de la embarcación y permiten eliminar hasta el 80 % de la resistencia que ofrecería un diseño convencional, además de no dejar estelas en el agua, algo muy útil para una ciudad como Venecia, donde las lanchas que recorren los canales generan una constante corriente de olas que pueden erosionar las estructuras de las casas.

Bautizada como P-8 Voyager, la nueva embarcación tiene una eslora de unos 8,5 metros, está diseñada para albergar a seis pasajeros y dos miembros de la tripulación, y podría servir de taxi acuático en lugares como Venecia o como embarcación auxiliar para grandes cruceros. Además, despega de la superficie cuando alcanza una velocidad de 30 km/h gracias a la reducción extrema de la resistencia. Que se desplace elevada sobre el agua permitirá a la nueva embarcación. no erosionar las cosas ni dañar los arrecifes de coral en el mar. A diferencia de los barcos con motores de combustión que generan un ruido que puede provocar la muerte prematura de peces por estrés, el nuevo diseño está ideado para deslizarse prácticamente en silencio sobre el agua.

La marca indica que la autonomía de esta embarcación alcanza las 50 millas náuticas (92,6 kilómetros). Según la empresa sueca esta autonomía es entre "dos y tres veces más que las lanchas rápidas eléctricas convencionales con baterías un 300 por ciento más grandes". Además incluye un piloto automático que funciona mediante un sistema de dirección fly-by-wire que mantendrá el rumbo establecido sin necesidad de mantener las manos en el timón. El controlador de vuelo emplea diferentes tipos de sensores que miden la posición, la velocidad y la aceleración del creando una experiencia de navegación precisa y estable. El software de control ha sido puesto a punto tras 10.000 horas de simulaciones, iteraciones de diseño y pruebas en el mar. Candela promete un viaje placentero y suave aunque el bote navegue sobre aguas agitadas.