La iniciativa española que lucha por los derechos de las plantas de ciudad

"Hay leyes que defienden los derecho de los animales e incluso de los edificios, pero no de las plantas en las ciudades. Nosotros vamos a cambiarlo iniciando un movimiento para preservar y defender a estos asombrosos seres vivos sin los cuales no podríamos sobrevivir ni diez minutos en la tierra". Con esta maravillosa declaración de intenciones comienza Jose M.Blas, paisajista experto en biofilia, jardines y ecosistemas verticales, su alegato en forma de iniciativa que nace de la necesidad de crear un movimiento que dé a la plantas el lugar que se merecen.

La idea llevaba tiempo fraguándose y Blas decidió que había llegado el momento cuando saltó la noticia de la aprobación por parte del ayuntamiento de Sevilla de la tala de un ficus que tenía alrededor de 100 años y al que llegaron a subirse vecinos y activistas para protegerlo. El árbol poco podía hacer, y no hay ninguna ley que regule estas situaciones. Y así es como tomó forma No Plants, No Life. "No somos la típica ONG, nuestro discurse persigue cuatro objetivos muy claros: difundir la palabra, hacer alianzas con organizaciones, encontrar causas comunes por las que luchar y por supuesto, ganar por KO esta batalla".

"Durante mi carrera profesional he podido diseñar y desarrollar jardines en todas sus variantes, y en estos últimos años como freelance, expandir mis horizontes como paisajista. Y me he ido dando cuenta de que existe mucho desconocimiento sobre las plantas, en algunos casos llegando a tratarlas como objetos inertes solo por el hecho de moverse más despacio que nosotros. Desde No Plants, No Life nos comprometemos a difundir y formar a las personas sobre lo importante que son las plantas para la vida en el planeta. Estamos en constante movimiento buscando alianzas con distintas empresas y organizaciones que tengan inquietudes similares a las nuestras y ya contamos con apoyos de arquitectos, interioristas, empresas de diseño, hoteles, periodistas, asociaciones y hasta clubes de boxeo. Porque esta iniciativa está planteada como un combate, y todo el que conoce un poco de este deporte sabe que ser agresivo para conseguir tus objetivos no implica, en ningún caso, ser violento. Es una cuestión de respeto, sacrificio y disciplina".

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