Viajar se ha convertido en una de las actividades de ocio más demandadas. A pesar de que el turismo es una actividad muy enriquecedora, también es altamente contaminante. Esto es así debido, principalmente, al transporte, pero también al uso de productos de usar y tirar relacionados con el mismo.
Podemos empezar por no imprimir los billetes ahora que lo más habitual es que tengamos la opción de billete electrónico. ¿Vas a usar realmente una guía turística de 300 páginas o solo necesitas un mapa? También hay aplicaciones en forma de guía para organizar y guiarnos por nuestros viajes, incluso con mapas descargables, de las ciudades más turísticas. Las de Ulmon no necesitan ni siquiera tener conexión a Internet.
8hz ha creado una mochila de viaje hecha de botellas de plástico reciclado
Sin embargo, es especialmente en la comida y la bebida para llevar donde más residuos se generan, la mayoría de ellos evitables con un sencillo kit que nos cabe en la maleta de mano o en la mochila.
El kit básico del viajero sostenible:
- Botella de agua reutilizable de acero inoxidable de tamaño medio, que podremos llevar siempre.
- Termo pequeño para café, té o sopa.
- Bolsas de tela de diferentes tamaños, también de rejillas, para comprar pan o fruta.
- Tápers reutilizables para llevar nuestra comida o para comida callejera.
- Juego de cubiertos de bambú.
- Pajita reutilizable de metal o bambú.
- Porta bocadillos.
- Pareo o pañuelo grande.
La botella de Sukori cuenta con un sistema de filtrado.
Muchas aerolíneas son conscientes de la preocupación que hay por los residuos, y no solo te animan a llevar tu propia taza reutilziable, sino que además te harán un pequeño descuento en el café o en el té si se la facilitas. En algunos países el agua deberá ser sí o sí embotella por problemas de salubridad, sin embargo, hay muchos destinos en los que podremos solicitar agua corriente, del grifo, en bares y restaurantes. También podemos incluir una botella reutilizable que no pese excesivamente, que deberemos llevar vacía por las restricciones de líquidos.
Cubiertos y funda de la firma Joseph Joseph
Si facturamos, podemos aprovechar para incluir algunas cosas. La comida callejera o para llevar es una opción habitual en muchas ciudades, así que también es buena idea llevarnos nuestros propios cubiertos, especialmente tenedor y cuchara. Llevar la ropa que realmente vamos a necesitar nos ayudará a no llevar una gran maleta llena de ropa pero sin espacio para nada más. Sin embargo, también es interesante que no nos dejemos nada de lo necesario. De esta forma, con algo de previsión, evitaremos compras innecesarias de productos con los que ya contamos en nuestro armario.
Bite comercializa pasta de dientes sólida en forma de tabletas.
La higiene es otra fuente de residuos importante. Desde los propios envases a algunas composiciones de jabones y cosméticos, podemos ayudar a no contaminar otra parte del planeta.
El perfecto neceser zero waste debe contener:
- Jabón y champú sólido.
- Desodorante sólido o en polvo.
- Crema hidratante ecológica.
- Peine o cepillo de madera.
- Polvos dentríficos en lata.
- Cepillo de dientes de bambú.
- Maquina de afeitar/depilar eléctrica, para evitar las desechables. Es posible que viajar con una maquinilla de afeitar clásica tengamos algún problema, ya que se usan hojas cortantes de doble filo.
- Discos desmaquillantes reutilizables.
- Copa mentrual, compresas de tela reutilizables o ecológicas de algodón orgánico
La firma Kai vende un set de minitallas que luego podemos reutilizar para llevar nuestro set de belleza de viaje.
Una de las ventajas de esta corriente sostenible a la hora de viajar es que desaparecen los formatos líquidos de algunos básicos de la higiene. Las restricciones de líquidos en los aviones nos obligan a llevar formatos más pequeños, si queremos utilizar nuestro jabón líquido favorito, nuestra crema habitual o el desmaquillante que mejor nos funciona, no es necesario comprar tallas pequeñas.
Un buen método para moverse en la ciudad es alquilar una bicicleta.
Finalmente, para movernos por nuestro destino, podemos elegir los medios de transporte público, como el metro, el tren o el autobús, frente al alquiler de coches o de motocicletas. En muchos destinos podremos incluso disfrutar de pasear en bicicleta. Sin olvidarnos de que perderse caminando es la mejor forma de conocer una ciudad desconocida.