Ciudades que reverdecen
La firma Arup edita la versión en español de su informe 'Cities Alive: Envolventes vegetales en edificios'
A medida que las ciudades crecen y demandan más recursos, el modo en que construimos tiene un impacto mayor sobre la biodiversidad. El aumento de la densidad urbana, el cambio climático y el desarrollo descontrolado harán que las infraestructuras conocidas hasta la fecha no sean suficientes. De esta forma, los edificios suponen un potencial sin explotar para que las ciudades sean más atractivas y resilientes. Se trata de una oportunidad única para replantearnos cómo las urbes pueden mejorar las infraestructuras verdes y, al mismo tiempo, minimizar el consumo de energía.
Arup, la firma global de consultoría e ingeniería que está detrás de algunos de los proyectos arquitectónicos más emblemáticos de las últimas décadas, como la Ópera de Sydney de Jørn Utzon, la torre Shard en Londres de Renzo Piano o el estadio olímpico de Pekín de Herzog & de Meuron, acaba de publicar la versión española de su informe Cities Alive: Envolventes vegetales en edificios, el cual aporta claves y soluciones ambientales para mejorar el bienestar y fomentar la sostenibilidad de las ciudades.
A partir del análisis de cinco grandes ciudades (Londres, Berlín, Melbourne, Hong Kong y Los Ángeles) realizado por expertos internacionales de ocho grupos de trabajo de Arup para cuantificar los beneficios en diferentes contextos morfológicos, geográficos y climáticos, la investigación destaca la importancia de las envolventes vegetales en edificios para la mejora de las ciudades y la calidad de vida de sus habitantes. Además de sus beneficios en planeamiento y mejora estética, está demostrado que pueden ayudar a reducir el calentamiento urbano (efecto isla de calor), así como a mejorar la acústica y la calidad del aire. Del mismo modo, pueden gestionar el agua de lluvia, crear hábitats de agricultura urbana, dar mayor longevidad a las cubiertas y mejorar el bienestar social a través del diseño basado en la biofilia (conexión del ser humano con la Naturaleza), integrándola en las construcciones.
Cristina Sanjuán, consultora senior de la filial española de Arup, quien formó parte de uno de los grupos de trabajo para este análisis, comenta al respecto: "El contexto de cambio continuo en el que vivimos nos obliga a generar soluciones innovadoras que vayan más allá, adaptando la naturaleza a la cohesión social a través de focalizar el diseño en la salud y el bienestar. Con este estudio queremos demostrar el papel significativo que desempeñan los envolventes vegetales para construir un mundo mejor".