Imaginar una colección de muebles inspirada en la caligrafía japonesa, donde cada pieza posee su propio carácter expresivo y que ha sido esculpida en madera de cedro quemada. Sublime. Eso es lo que hizo el estudio de diseño arquitectónico italiano SABI de Sabina Blasiotti con Characters. Y nos ha encantado.
Lámparas entrelazadas.
Foto: SABI by Sabina Blasiotti
Se trata de una familia de sillas, mesas, un armario, una estantería, un sofá, espejos, lámparas, portarretratos y jarrones. "Characters tiene como objetivo abordar la autoexpresión de los trabajadores calificados", cuentan desde la marca, "brindando la oportunidad de crear esculturas a medida con una ejecución fluida y herramientas para tallar madera. A cambio, cada mueble permite que el temperamento y la confianza de su creador se expresen visiblemente en su trabajo".
El negro le da prestancia de letra impresa.
Foto: SABI by Sabina Blasiotti
Cada pieza está elaborada en madera de cedro tallada y quemada, excepto las lámparas y el espejo, que incluyen metales adicionales para las cabezas móviles de las lámparas y el acabado del espejo.
Líneas originales para el armario.
Foto: SABI by Sabina Blasiotti
La madera de cedro esculpida se quema en la superficie para obtener una capa de carbono que permite una conservación más sostenible de la madera en comparación con los aceites y pinturas tradicionales. Además, el acabado carbonizado proporciona a los muebles un aspecto negro, que recuerda a los caracteres de tinta negra de la caligrafía.
Enfrentadas y con vida propia.
Foto: SABI by Sabina Blasiotti
"La encarnación de la autoexpresión en el diseño y la arquitectura es muy importante para mí", dice la creadora, Sabina Blasiotti. "Siempre me ha fascinado la caligrafía japonesa como una exhibición del calígrafo en un momento del tiempo produciendo piezas artísticas que parecen vivas. Asimismo, concebí la colección como una expresión personal en un momento en el tiempo, con cada mueble diseñado después de una serie única de bocetos rápidos que no han sido editados ni corregidos".
Son tan orgánicos que parecen tener vida propia.
Foto: SABI by Sabina Blasiotti
"Con este método, quería que los muebles mostraran personalidad e imperfecciones, y que dieran vida y expresión a los espacios habitables. Por eso, cada pieza de la colección parece tener su propia vida consciente, siendo familiares para mí, pero también extraños. Siguen cambiando y revelando siluetas inefables a medida que te mueves y giras a su alrededor, y son impredecibles mientras juegan con luces y sombras a lo largo de los días y las estaciones".