Racquets, de Penhaligon’s, celebra la elegancia del tenis bien jugado
La mítica barbería de Jeremyn Street, –fundada hace 150 años por William Penhaligon, el barbero que cogió un tren dejando atrás su Cornualles natal para descubrir la gran ciudad, – reinterpreta su clásico perfume Racquets.
Con esencias cítricas de limón, madera de gaiac, ambrox y cuero, es un aroma sencillo, tranquilizador por su familiaridad, alegre y descomplicado. Es elegante precisamente en su falta de pretensiones.
Frasco de cristal de aspecto vintage con la nueva reinterpretación del clásico Racquets de Penhaligon.
Inspirado en las tardes en el Club, en la emoción de los partidos de tenis, en esa entrega, en la pasión puesta en la cancha para salir victorioso, en la ropa blanca y en juego limpio; como dice Penhaligon’s, el tenis es un deporte de caballeros. Ah! Pero el tenis no es en realidad un deporte, ¡es un estilo de vida! y Racquets está inspirado en todo él. El cóctel cítrico del bar del Club, el aroma del verano.
Fabrice Pellegrin, el perfumista encargado de elaborar el aroma, cuenta cómo, durante la creación de esta fragancia, su mente y nariz viajaban de espectáculo en espectáculo de los deportes ingleses, y así es como iban apareciendo las diferentes notas, el cuero de las ecuestres sillas de montar a caballo y de las empuñaduras de las raquetas; la frescura del limón evoca la luminosidad del dress-code del torneo de Wimbledon y la energía del juego. Según Pelegrin, se trata de un perfume sin género, en el que los olores están equilibrados sin dar el privilegio ni a lo femenino ni a lo masculino.
Diseño del packaging del nuevo perfume de Penhaligon. Ilustraciones de raquetas antiguas son el motivo principal de la caja y la inspiración del perfume.
El diseño del frasco y de la caja que lo contiene es, como se podría esperar, clásico y de una elegancia inglesa. Los perfumes de Penhaligon’s suelen estar cobijados en estas botellas de cristal con un lazo de tela en el cuello, en el caso de Racquets, la pajarita está hecha de una cinta roja y blanca, el tapón es una esfera de vidrio. La etiqueta tiene un aire retro, blanca, con los sellos de la corona y un juego tipográfico en negro y rojo. En esos mismos tonos está diseñada también la caja, que sorprende con un estampado de raquetas antiguas.
¡Que empiece el partido!