Choupette, de quien se rumorea que heredó algunos de los millones de Lagerfeld, respaldó el diseño del prototipo de cama cuando se le entregó a través de su agente.
"Enviamos nuestra hamaca para gatos al agente de Choupette en París como regalo", dice el fundador de LucyBalu, Mathias Wahrenberger. "Un tiempo después, recibimos un mensaje diciendo que nuestro Swing era el nuevo lugar favorito de Choupette", continúa.
"Este fue el momento en el que nuestro sueño de colaborar con el gato de Karl Lagerfeld se hizo realidad", acaba sentenciando.
La aprobación de Choupette ha sido toda una sorpresa para los diseñadores de LucyBalu, pues el gato birmano blanco de ojos azules está acostumbrado a vivir en el regazo del lujo, volar en un jet privado y ser atendido por las criadas.
"Solo elegimos ciertos proyectos que creemos que realmente encajan con Choupette", comenta su agente Lucas Berullier.
Anteriormente, fue el rostro de una línea de maquillaje para Shu Uemera y el fabricante de juguetes alemán Stieff la convirtió en un peluche, pero Swing será su primera incursión en el diseño de muebles.
SUSCRÍBETE A NUESTRA NEWSLETTER PARA CONOCER LO ÚLTIMO EN ARQUITECTURA Y DISEÑO