Este hotel en Creta te espera en verano
Con una arquitectura brutalista, un mobiliario de diseño moderno y un entorno junto al mar rodeado de naturaleza, el nuevo hotel Casa Cook Chania tiene todos los ingredientes para convertirse en el mejor destino para tus vacaciones
En un enclave idílico al noroeste de la isla griega de Creta, se encuentra Casa Cook Chania, un complejo en clave boutique, especialmente pensado para disfrutar en familia, que pertenece al grupo Thomas Cook Hotels & Resorts. El hotel, de reciente apertura, ha contado con la intervención del estudio Lambs and Lions, con sede en Berlín, responsable de toda la concepción del proyecto, además del estudio de arquitectos griego K-studio y la interiorista Annabell Kutucu. La aportación de todos ellos ha dado como resultado la concepción de un pueblo en el que se suceden las diferentes villas de poca altura que se disponen ladera abajo hasta desembocar a pie de playa. Tales construcciones se basan en cubículos de hormigón, revestidos de madera y asentados sobre estructuras de piedra local que asoman hacia el mar.
De estilo sofisticado y encanto natural, los interiores presentan suelos de madera y un mobiliario de diseño moderno, predominantemente de madera oscura, combinado con acabados de lino y ratán. Pese a la elección de piezas y superficies de densas texturas y tonos oscuros, las estancias resultan luminosas gracias a las grandes aperturas que permiten la entrada de luz natural. Estas se complementan con tragaluces y pequeños cortes en la fachada de piedra logrando iluminar todos los rincones incluso los más interiores. Asimismo, la pureza de líneas y la tendencia brutalista que determina el hormigón y la piedra dominantes en el proyecto, se ve contrarrestada por la densa y exuberante vegetación tropical que rodea las diferentes villas. El exterior, a su vez, se acompaña de mobiliario de caña hecho a mano.
Aunque el total de 106 villas de las que consta el hotel cuentan con terraza privada, muchas de ellas con piscina, existe otra de mayor tamaño de uso común. Ahora bien, el mayor placer reside en el sinuoso y verde sendero que baja hasta el mar. El complejo se complementa con una serie de instalaciones comunes dispuestas a lo largo de la playa. Este es el caso del restaurante, el bar y la zona de recepción, con una estética más rompedora y unas prestaciones adecuadas para soportar una mayor exposición a la sal y al viento que el resto de villas.