Esta es la ropa que ayudará a protegerte del coronavirus
Los tejidos con propiedades antibacterianas y desinfectantes ya eran una realidad. Ahora, las firmas de moda y textiles también quieren que protejan de los virus.
Cada chaqueta Full Metal Jacket de Vollebak está confeccionada con once kilómetros de hilo de cobre.
La pandemia de COVID-19 ha abierto un nicho de mercado para las firmas de moda y textiles, que han visto en la posibilidad de incorporar propiedades de resistencia contra los virus en las prendas y tejidos que diseñan una interesante posibilidad de negocio.
En Italia, la empresa Albini afirma que su nuevo tejido ViroFormula es capaz de inhibir virus y matar bacterias que entran en contacto con la superficie del tejido en pocos minutos gracias a la tecnología HeiQ Viroblock. Los elementos químico-textiles de Viroformula combinan tecnologías de base plata que generan reacciones antivirales y tecnología de "vesícula grasa" (liposomas) que contribuye a desgastar el colesterol de la membrana del virus, utilizado por este para adherirse a las células del huésped.
El nuevo tejido ViroFormula desarrollado por la firma Albini combina tecnologías de nanopartículas de plata y de liposomas para repeler los virus.
Por su parte, en España la empresa Sepiia, dedicada a la confección de prendas "inteligentes" con propiedades antimanchas, antiarrugas y antiolores, está colaborando actualmente con la científica Paula Bosch, del Instituto de Ciencia y Tecnología de Polímeros adscrito al Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), para desarrollar tejidos con actividad virucida para inactivar el SARS-CoV-2.
A las propiedades antimanchas, antiarrugas y antiolores con que confecciona sus prendas, la marca española Sepiia quiere añadir ahora capacidad virucida.
Todas estas iniciativas aplican la nanotecnología en su búsqueda de tejidos repelentes frente a los virus, pero hay otras estrategias que pueden ser válidas. Como la que ha ideado la firma de moda Vollebak, que ha diseñado una chaqueta confeccionada en un 65% con hilos de cobre, el material que se ha revelado como más resistente ante el SARS-CoV-2. Cuando un patógeno aterriza sobre la superficie de la prenda, el cobre libera iones que perforan la membrana del virus y destruyen su ADN y ARN. Esto evita además que el patógeno pueda mutar, por lo que no puede desarrollar resistencia frente al cobre.
El tejido de la cortina Gunrid, de IKEA, lleva un revestimiento de base mineral que, en contacto con la luz natural, elimina sustancias contaminantes del aire como el acetaldehído.
Los tejidos para el hogar con propiedades antibacterianas y desinfectantes ya eran conocidos desde hace tiempo. Todos ellos suelen basarse en tecnología de nanopartículas de plata, un potente agente antimicrobiano que es capaz de acabar con todo tipo de gérmenes: bacterias, hongos, virus y protozoos.
De todos modos, hay que puntualizar que las propiedades apuntadas por todos estos productos frente al coronavirus causante de la pandemia de COVID-19 son teóricas. Se sabe tan poco todavía de este virus que resulta difícil saber si los tratamientos para repelerlo serían tan eficaces como se han demostrado frente a otros microorganismos y virus de la misma familia. Pero no cabe duda de que la moda "profiláctica" puede tener un futuro brillante a poco que se revele mínimamente eficaz.